Luego del impacto, la conmoción y las consecuencias, el femicidio de Florencia Romano (14) entrará esta semana en una etapa de decisiones sobre los acusados. Días fundamentales para la imputada, que podría ser liberada. En otra arista de la investigación, el CEO y sus operarios en la mira.
Con la imputación y el traslado a la cárcel de Pablo Arancibia (33) y Micaela Méndez (27), principales sospechosos, la atención y el enojo de la sociedad se centraron en la no intervención de la efectivo policial del CEO (Centro Estratégico de Operaciones), que atendió y cortó el llamado al 911 de un vecino del callejón Berra que alertaba sobre los gritos de auxilio que se escuchaban desde la casa en la que se cometió el crimen. Esta uniformada fue suspendida el viernes, luego de que la fiscalía extrajera compulsa de la causa para que se investigue esta falta. Ya se encuentra en situación de pasiva, cobrando la mitad de su salario.
Esto se tramita en la Inspección General de Seguridad (IGS), donde esperan que en los próximos días declare esta auxiliar, identificada como Soledad Herrera. El organismo se encuentra reuniendo pruebas y cuenta con la grabación de la comunicación, con lo cual será convocada para que dé explicaciones.
Además, en la acumulación de información la Inspección analiza si hubo más responsabilidades en la no asistencia al lugar del hecho. Fuentes de la IGS reconocen que podrían haber más sumarios, por ejemplo, para superiores de Herrera o coordinadores que no hayan cumplido los protocolos.
Mucho se dijo en estos días que la orden de enviar presencia policial a la casa de Arancibia podría haber evitado la tragedia, teniendo en cuenta que la comisaría 29 está a sólo dos cuadras de la escena del crimen.
En paralelo a la investigación interna, la Justicia avanza también sobre la causa penal que enfrentará la operadora del CEO. En principio se especulaba con una acusación por incumplimiento de los deberes de funcionario público-delito excarcelable-, aunque desde la fiscalía de Homicidios le dieron intervención a la fiscalía de Delitos No Especializados ya que la imputación sería más grave, y en base a esto la involucrada podría llegar a quedar detenida. El fiscal Jorge Calle recibió las actuaciones y deberá avanzar en sobre la situación de la uniformada.
Cerca de la libertad
Respecto a Arancibia y Méndez, imputados como coautores del femicidio, las últimas declaraciones ponen en una beneficiosa posición a la mujer. Una serie de testimoniales acreditarían la coartada que la acusada estuvo el sábado y el domingo de la semana pasada en la casa de unos parientes y no en el lugar donde vive con su novio, la propiedad en la que asesinaron a Florencia.
Una de esas versiones fue la del testigo clave, primo de Arancibia, quien recibió el llamado de este sujeto para pedirle que vaya en el auto hasta su casa. A partir de ahí el engaño del “perro muerto” y el descarte del cadáver de la adolescente en calle Alsina. Después de esto los dos se fueron a Luján, a una juntada familiar en la que habría estado Méndez desde temprano. Esto lo sostienen otras personas que se presentaron ante la fiscal Claudia Ríos, frente a lo cual el caso en los próximos días podría quedar con un solo detenido.
La despedida de Florencia: “Que caigan todos los responsables”
Tras la identificación del cuerpo y la autopsia, la familia Romano recibió los restos de Florencia para realizar el velorio y la posterior cremación. Este doloroso momento se vivió en la jornada del sábado, con ceremonias muy íntimas.
Ayer Los Andes dialogó con el padre de la víctima, quien brevemente habló de sus expectativas frente al caso: “Quiero justicia, que caigan todos los responsables que tienen que caer, desde el de más arriba hasta el de más abajo”:
“Si el CEO actuaba rápido, quizás a mi hija la salvaban. No se imaginan el dolor que se siente”, cerró José Romano.
La autopsia de Florencia aún no tiene causa de muerte establecida, pero si el adelanto forense detalló un corte en el cuello y numerosos traumatismos y fracturas, principalmente en la cabeza.
Repudio de la Junta de Estudios Históricos sobre el vandalismo
La Junta de Estudios Históricos de Mendoza emitió un comunicado condenatorio por los daños provocados a instalaciones públicas por individuos que tergiversaron la protesta por el alevoso asesinato de la adolescente Florencia Romero.
El texto de la institución de calle Montevideo 544 señala: “La Junta lamenta enormemente y repudia los injustificados actos de daño al patrimonio público provincial acontecidos el viernes pasado en los tres poderes públicos, situación que se agrava al tratarse de inmuebles que simbolizan nuestro estado de derecho y sistema democrático de gobierno”.
Y añade: “Cualquiera que sea el reclamo que se efectúa, incluso en el supuesto que sea legítimo, nada puede avalar la violencia o la destrucción de bienes públicos de trascendente valor histórico patrimonial, y menos aún tratar de transmitir el mensaje de avasallamiento a nuestro sistema de gobierno, previsto por la Constitución nacional. En el caso, el oportunismo de los violentos se dio en el marco de un terrible crimen que enluta a Mendoza toda, y esta Junta se solidariza con el dolor de la familia y aguarda que se haga efectiva la vara de la Justicia”.
Los actos vandálicos tienen una investigación abierta y autores identificados.