Mariano Zutaro (22) lucha por su vida, se mantiene con pronóstico “grave y reservado” y está internado en terapia intensiva del Hospital Central desde el mediodía de ayer. “Politraumatismo grave con fractura de huesos craneales, hematomas subdurales y contusión cerebral” es lo que detalla el más reciente parte de salud de este joven, a quien además le colocaron un captor de pic y permanece intubado para poder respirar.
Aldana Montenegro (25), por su parte, se encuentra “estable hemodinámicamente, lúcida y orientada”, internada en el Hospital Lagomaggiore. Llegó también ayer con politraumatismos, fractura de base de cráneo, con hematoma subdural bilateral y un cuadro que no exigía cirugía. Su estado es bastante más favorable que el del joven que la acompañaba ayer, minutos después de las 12, cuando un colectivo los embistió violentamente en el carril Godoy Cruz (Guaymallén).
Fueron apenas unos pocos segundos, un instante que marcó la vida de ambos y que los llevó de lo que era una simple acción como bajar del colectivo y cruzar una calle a estar hoy debatiéndose entre la vida y la muerte. Mariano y Aldana fueron atropellados durante el mediodía del martes cuando cruzaban por el carril del metrobus construido en esa concurrida calle de Guaymallén. Un colectivo del grupo 800 los atropelló de frente y a una velocidad considerable.
Según se puede ver en las imágenes tomadas por una cámara de seguridad del cruce entre Godoy Cruz y Arenales, en los segundos previos al brutal accidente se observa que Mariano Zutaro intenta -desesperada e infructuosamente- salvar a Aldana Montenegro.
El momento en que Mariano intenta salvar a su compañera
Ambos jóvenes habían descendido minutos antes de las 12:04 de ayer de un colectivo que se había detenido en una de las manos del carril del metrobus guaymallino, a la altura de una parada reglamentaria. Luego de ello, intentaron cruzar por detrás del micro para llegar a la otra vereda, aunque -para ello- primero debían atravesar el otro carril exclusivo para colectivos. Y fue en ese momento en que el colectivo del grupo 800 que circulaba por su carril y en dirección contraria a la del micro del que ambos acababan de bajarse los embistió con su trompa. El vehículo, que no pudo ver a los jóvenes ya que el micro del que acababan de bajar obstruía la visión de su conductor, los atropelló violentamente, haciéndolos caer e -incluso- salir expulsados algunos metros.
En las milésimas de segundos que precedieron al brusco impacto se ve cómo Mariano y Aldana advierten que se aproxima el colectivo e, incluso, el joven de 22 años intenta empujar hacia adelante a Aldana para que quede afuera de la zona de alcance del colectivo y de peligro. Sin embargo, el impulso no fue suficiente y ambas víctimas fueron golpeadas por el colectivo.
El detalle es que este movimiento y la poca distancia que le permitió correrse a la joven de 25 años el empujón de su compañero podrían haber sido fundamentales para que las consecuencias en ella sean -al menos hasta el momento- más leves que las de Zutaro, quien fue impactado de lleno por el colectivo.
Las familias de Mariano Zutaro y de Aldana Montenegro permanecen expectantes ante la evolución del estado de salud de ambos jóvenes.