Este jueves falleció un alumno que era alumno de la UBA. El joven de 20 años estaba esperando para rendir un examen, se descompensó y falleció en la institución educativa. Estudiantes, denunciaron que la ambulancia tardó mucho tiempo en llegar y no pudo ser atendido de forma inmediata.
“UBA XXI lamenta profundamente comunicar el fallecimiento de uno de sus estudiantes en el día de la fecha. Acompañamos el dolor de su familia y seres queridos e informamos que mañana viernes 23 de septiembre quedarán suspendidas por duelo todas las actividades de este programa, incluyendo los exámenes presenciales planificados, que serán reprogramados. La nueva fecha de examen se publicará en el calendario de exámenes del sitio ubaxxi.uba.ar”, comunicó la institución.
Si bien desde la Universidad no dieron a conocer la identidad del fallecido, pero a través de un posteo de la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) se supo que se trataría de Edwin José Gabriel Gallegos Vilchez, a quien despidieron con tristeza.
Además, la universidad en conversación con el Perfil confirmó que el estudiante fue atendido por una enfermera profesional y un desfibrilador “de última generación”. También sostuvieron que la ambulancia tardó aproximadamente 15 minutos en arribar al lugar y los profesionales estuvieron una hora tratando de resucitar al joven.
El hecho ocurrió en el aula 3 de la Facultad de Económicas, se aisló la zona, se cambiaron las aulas, el resto de la facultad siguió trabajado y luego de avisar y contener a la familia, arreglar con la policia, suspender los examenes de UBA XXI. “Es la primera vez que sucede algo así”.
BRONCA ENTRE LOS ESTUDIANTES
A través de los comentarios de estudiantes en redes sociales, se confirmó que las clases continuaron con normalidad durante la jornada. “Cómo puede ser que un pibe se murió en la facultad y no suspendieron las clases. Hay cosas que son inentendibles”, tuiteó uno de los alumnos.
La universidad al ver la repercusión del tweet en las redes sociales, confirmó que asistieron al joven de 20 años, aislaron la zona y cambiaron de aula a los alumnos que estaban rindiendo examen. Conocido el deceso, se informó a la familia y luego se la contuvo. “Cuando la situación estuvo más clara, se decidió suspender las actividades del día siguiente”, comunicaron desde la Universidad sobre el accionar.
Se investiga si el estudiante presentaba alguna patología previa. Un miembro de la facultad de Psicología se puso a disposición del entorno más cercano al alumno fallecido para brindar contención, aunque desde UBA XXI sostuvieron que se encargaron de eso.