Como en “El robo del siglo” pero más actual, unos delincuentes habían hecho un robo minucioso, con tareas de inteligencias e inhibidor de alarma. El hecho ocurrió en la localidad bonaerense de Caseros de donde se llevaron 500 mil pesos y 70 mil dólares sin recurrir a la violencia. Sin embargo, detrás de toda esa inteligencia, no pensaron en el último detalle: pasar desapercibidos para no levantar sospechas.
Luego del gran golpe, los delincuentes se fueron a festejar al boliche Pinar de Rocha de Villa Sarmiento y se gastaron 300 mil pesos en una noche y se pusieron en evidencia con la justicia.
La policía logró, en las últimas horas, dar con uno de los sospechosos, un joven de 21 años, en la intersección de la Avenida San Martín y Gabriel Linares. Sus dos presuntos cómplices ya fueron identificados y son buscados por las autoridades.
El gran y millonario robo
El 27 de mayo pasado la banda dio el gran golpe. Habían marcado a la víctima, una mujer a la que siguieron desde la escuela, donde había dejado a su hija, hasta su casa en un edificio ubicado sobre la calle Esteban Merlo al 4700.
Al llegar al lugar, los ladrones usaron un inhibidor de alarma para abrir la puerta del vehículo de la mujer y robaron de ahí las llaves del departamento. Cuando la mujer no estaba en casa, subieron hasta el octavo piso, guardaron todo el dinero que encontraron en un bolso y salieron por la puerta principal, a cara descubierta y con total impunidad. La escena quedó registrada en una cámara de seguridad del edificio.
En ese momento no habían muchos más datos, pero ahora con la detención de uno de los sospechosos fue que el caso salió a la luz.
La caída por derroche de dinero
En los días posteriores al asalto, se fue esclareciendo más quienes eran los autores del hecho. Es que los ladrones fueron a una concesionaria y compraron en efectivo y en dólares un auto de alta gama.
Como segundo rastro, decidieron ir a celebrar el gran golpe que habían dado y fueron a un boliche llamado Pinar de Rocha, en donde gastaron 300 mil pesos en una sola noche. Sin embargo, lo peor para su suerte vino después, cuando al retirarse del lugar chocaron a bordo de un Peugeot 208 blanco, que era el mismo auto con el siguieron a la víctima y llevaron a cabo el robo.
Teniendo todas estas pistas, el fiscal de la UFI N°7 del Departamento Judicial San Martín, Fabio Cardigonde, ordenó una serie de medidas y allanamientos para dar con los delincuentes. Ahí atraparon en la casa de la calle Linares y Av. San Martín a uno de los sospechosos.
El fiscal también logró dar con el vehículo con el cual realizaron el robo, en un taller de chapa y pintura.
Por último, en otro operativo encontraron una ametralladora UZI, dos réplicas de fusiles FAL, ocho réplicas de pistolas calibre 9 mm, una pistola Bersa Thunder calibre 40, celulares, monedas y billetes de varios países.