Mañana comenzarán a definirse los carriles jurídicos por los que podría transitar la causa por la muerte de Carlos Amieva (53), el reconocido entrenador de vóley y beach vóley del Valle de Uco que falleció en enero pasado en Tunuyán tras una pelea callejera.
Por el caso se encuentran detenidos los transportistas Matías Sicre (24) y su tío, Diego Sicre (30), quienes fueron imputados inicialmente por “lesiones graves”. Luego de que “el profe” Amieva quedara internado en el Hospital El Carmen y con coma inducido, los jóvenes agresores fueron imputados por “homicidio simple en grado de tentativa”, mientras que con el fallecimiento de la víctima ya confirmado, la imputación cambió a “homicidio simple” que se mantiene actualmente.
Ayer, los Sicre –asesorados por el abogado Daniel Sosa Arditi- decidieron declarar ante el fiscal de Tunuyán Jorge Quiroga. La declaración fue escueta, dejando en claro una posición distinta a la sostenida por la acusación.
Apoyándose en las pruebas que constan en el expediente, entre ellos testigos del hecho, la postura de la fiscalía es que los imputados habrían encerrado con su camioneta al auto de Amieva, se bajaron y posteriormente lo habrían agredido.
Declaraciones de los imputados
En cambio, la declaración de los Sicre apunta a que fue Amieva quien los habría increpado y luego atacado y que, ellos solo se defendieron. Es más de la pelea –dicen- solo habría participado uno de ellos.
Diego negó haber golpeado a Amieva, en tanto que Matías afirmó que lo golpeó una sola vez y para defender a su tío que era agredido. Para ellos todo habría comenzado cuando ellos, a bordo de una Toyota Hilux quedaron detrás del Peugeot de entrenador, quien se fastidió porque creyó que circulaban con luces altas. Eso disparó la pelea que terminaría de forma fatal.
De esta forma, todo hace suponer que desde la defensa de los acusados, podrían plantearle mañana al juez Oscar Balmes, durante la audiencia de pedido de prisión preventiva, un cambio rotundo de escenario.
Así no se descarta que se solicite que se aparte de la causa a Diego Sicre porque no habría participado de la pelea y que se cambie la caratula de homicidio simple para Matías por el homicidio preterintencial, es decir que el joven habría golpeado a Amieva –una sola vez- pero nunca con la intención de matarlo.
Este cambio de calificación resulta importante: el homicidio simple tiene penas de van de los 8 a los 25 años de cárcel; el homicidio preterintencional, de 1 a 3 años. De cumplirse este panorama el defensor estaría en condiciones de solicitar la libertad de los Sicre, quienes pasan sus días en el penal de Boulogne Sur Mer.
Frente a esto la postura de la Fiscalía de Tunuyán será sostener la acusación de homicidio simple y que los imputados sigan detenidos.
Discusión, golpes y muerte
Según la acusación, el sábado 15 de enero a las 23 Amieva y su pareja circulaban por la calle Irigoyen, a bordo de un Peugeot. Al llegar a las cercanías del barrio Güemes, los Sicre, a bordo de una camioneta lo habrían empezado a insultar porque iba a baja velocidad.
Entonces en un momento, la camioneta pasó al auto, lo habría tocado y luego encerrado. Amieva se bajó del auto y comenzó una discusión con los dos jóvenes lo habrían golpeado, quedando en el piso gravemente herido.
Los agresores escaparon de lugar y tras ser identificados, fueron detenidos por la policía.
Por su parte, Amieva fue trasladado al Hospital Scaravelli y tras diagnosticársele traumatismo de cráneo, fue derivado al hospital El Carmen, donde murió finalmente en la madrugada del jueves 20 de enero.