Un hombre arrojó a su hijo de cinco años desde el tercer piso de un edificio tras una discusión con su pareja. El sujeto tenía denuncias de violencia familiar y hasta una restricción de acercamiento hacia todos los integrantes de su familia.
Tras el golpe, el menor resultó con politraumatismos por caída de altura, fractura de cráneo, fractura desplazada de radio y cúbito de ambos brazos y contusión pulmonar, entre otras observaciones.
“Se le efectuó tomografía de cerebro, tórax y abdomen y las interconsultas correspondientes con los especialistas en traumatología, cirugía y neurocirugía y se decidió su derivación inmediata a la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UCIP) del hospital”, explicó el director del hospital materno infantil.
El niño fue intervenido quirúrgicamente “en ambos brazos y el cirujano plástico le hizo suturas a nivel del rostro debido a los múltiples cortes que presentaba en la zona”.
Arrojó a su hijo del tercer piso
El hecho ocurrió cerca de las 9 de la mañana del domingo en un edificio de la calle Fotheringham al 1700 del barrio La Pilar, en la ciudad de Formosa, cuando la Policía fue convocada por vecinos ante un conflicto familiar, por lo que personal de la Zona Uno del Comando Radioeléctrico Policial acudió al lugar y observó que un hombre se encontraba en la terraza en el tercer piso.
Por razones que se tratan de establecer, ante la mirada de todos, el hombre sujetó a su hijo, lo levantó y lo arrojó al vacío impactando en la vereda, informó Télam.
Ariel Urbieta, el abogado de la mujer, aseguró a Radio Formosa que ya habían denunciado en abril pasado hechos de violencia familiar y de género por parte del apresado y se había pedido una restricción de acercamiento, porque es un consumidor problemático de sustancias y padece esquizofrenia.
“Es una persona que no podía estar en un ambiente normal como lo es el de la familia que ya venía soportando muchos hechos violentos. Se hicieron denuncias penales”, explicó el letrado.
“Solicitamos la internación involuntaria para que el juez tome las medidas para internarlo, pero el tribunal contestó luego de tres meses y no hizo intervención”, agregó.
“Es ahí donde se produce el primer hecho, este hombre se encierra con el menor en la casa por seis horas sin querer salir; por lo que se lo envía a la localidad de Villafañe para una internación y rehabilitación. Posteriormente logra el alta en tres meses y sufre otra recaída con episodios violentos, amenazas, armas blancas, por lo que se vuelve a activar el protocolo y se lo vuelve a internar”, expuso el abogado.
Y sostuvo que “el Tribunal estaba al tanto de los informes psicológicos y psiquiátricos, aun así, no dictó ningún tipo de medida. Ellos determinan que podía cumplir con las obligaciones como padre. Hay que poner la lupa sobre el tribunal y los jueces pidiendo más seriedad y compromiso”.