Un estremecedor hecho de violencia conmocionó a la localidad balnearia de Pinamar. El pasado lunes, un chef fue brutalmente asesinado a puñaladas en el interior de su departamento. El hombre, de 36 años, presentaba 40 puntazos en su cuerpo y un golpe en la cabeza.
El hecho fue notificado a las autoridades por medio de un llamado al 911 en horas de la noche. Una joven de 28 años con la que la víctima, identificada como Nicolás Eduardo Tapia Páez, compartía el alquiler del departamento ubicado en un edificio entre las calles De la Sirena y Del Caracol, a metros de Bunge y El Mar, y fue quien halló al chef en el piso, sin signos vitales y semidesnudo.
La misma escena fue la que encontraron las autoridades al dirigirse al inmueble ubicado en un tercer piso. Tapia Páez presentaba un golpe en la cabeza y alrededor de 40 puñaladas en zonas del tórax, cuello y espalda. “El asesino actuó con mucha saña”, revelaron fuentes cercanas al caso.
El piso estaba manchado con sangre, pero los investigadores no dieron con el arma homicida ni con el celular de Tapia Páez. En este sentido, los peritos encontraron varias huellas en la escena del crimen que, por su tamaño y el tipo de calzado, pertenecerían a un individuo masculino, informó La Nación.
En adición, las autoridades se encuentran en la búsqueda del teléfono de la víctima, para poder acceder a los mensajes y llamadas que realizó o recibió en los momentos previos a su muerte.
Los investigadores creen que el asesino conocía a la víctima. Esto se debe a que vecinos del edificio escucharon una discusión en horas de la mañana y un pedido de ayuda. A esto, se suma que no se registraron faltantes en el departamento, por lo que fue descartado un robo, informó el medio Pinamar a Diario.
Por otro lado, también evalúan si se trató de un homicidio motivado por un ajuste de cuentas o por cuestiones personales.
En el caso intervino personal de la SubDDI, Policía Científica, Guardia Urbana y el fiscal Juan Pablo Calderón, quienes tomaron testimonios a vecinos de la zona y analizaron las imágenes captadas por cámaras de seguridad para dar con quienes ingresaron y salieron del edificio al momento de los hechos.