Un comerciante fue condenado a 11 años de prisión por El Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N.º 18 por haber abusado sexualmente de una joven a la que había contratado para trabajar en su local. Esto sucedió en el barrio porteño de Balvanera, en enero de 2021. El fiscal Guillermo Morosi, que intervino en el juicio, había solicitado 13 años de prisión para el responsable del delito de “abuso sexual con acceso carnal” contra una joven oriunda de Venezuela.
Según publicó el Ministerio Público Fiscal de la Nación, los jueces Domingo Altieri, Luis Márquez y Darío Medina ordenaron también que se disponga la obtención y extracción del perfil genético del condenado para que sea remitido al Banco de Datos Genéticos, de acuerdo a la Ley N°26.879, que creó el Registro Nacional de Datos Genéticos vinculados a Delitos contra la Integridad Sexual.
Según lo descripto por la acusación, el hombre había publicado una oferta laboral en el grupo “Venezolano en Argentina”, en la red social Facebook, y la chica, quien entonces tenía 18 años, respondió a la propuesta y luego de un intercambio de mensajes, fue al local a la hora acordada, donde encontró la persiana baja.
Igualmente, la madre de la joven que estaba al tanto de la situación, llamó al comerciante para decirle que la joven estaba frente al comercio, por lo que el acusado la hizo pasar y le explicó los detalles del trabajo. Además, le hizo preguntas sobre cuestiones de índole personal y ajena al trabajo que ofrecía.
Según la información recolectada, en ese momento se le acercó desde la parte de atrás del lugar y la quiso besar, mientras le preguntaba si le gustaba el vodka y le decía que “necesitaba una pareja para que se quedara con el negocio y así poder abrir otra sucursal”. Luego bajó las persianas del local.
Más tarde pasó por el lugar la madre de la joven, le preguntó si estaba todo bien y la joven le respondió que se quería ir, que estaba asustada y que el hombre había cerrado el local. En ese momento la mujer llamó al 911, sin embargo, el acusado no le concedió el acceso a la policía.
Finalmente, los efectivos lograron ingresar y en el fondo del local encontraron a la víctima desvanecida y en estado de shock, por lo que tuvo que ser trasladada al Hospital Ramos Mejía.
Según la acusación por parte de la fiscalía, el imputado aprovechó que la víctima estaba confundida e indefensa tras haber ingerido una bebida que él le dio para desvestirla y abusar sexualmente de ella, causándole lesiones en distintas partes del cuerpo.
La causa estuvo a cargo de la titular de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°41, Silvana Russi.
Los fundamentos de la sentencia se conocerán el próximo jueves 9 de febrero.