El empresario que conducía un lujoso Mercedes Benz C300 con el que la noche del martes atropelló y mató a dos jóvenes, y dejó muy gravemente herida a una muchacha en El Challao, fue imputado por el trágico hecho. Además se le imputó la portación ilegal de arma de guerra, ya que circulaba con una pistola calibre 9 milímetros. Seguirá detenido hasta que se resuelva su situación procesal.
En la tarde de este jueves el fiscal de Tránsito Fernando Giunta finalmente imputó a Jorge Roberto Díaz Ríos (62) por “homicidio culposo agravado por la conducción imprudente de vehículo automotor, agravado por ser más de una las víctimas fatales, en concurso ideal con lesiones graves culposas por conducción imprudente”, debido a las heridas que le provocó a la otra joven.
El fiscal tiene probado que a las 22.10 del último martes Díaz circulaba por el sector Sur de la rotonda de calle Regalado Olguín a bordo de su Mercedes Benz, cuando perdió el dominio del vehículo y embistió a Daiana Tamara López, Pablo Maximiliano Navarro y Andrea Morales, provocando la muerte de los dos primeros y ocasionándole a Morales la extirpación de bazo y fractura de pelvis y costillas. Para la fiscalía esas son “lesiones con tiempo probable de curación mayor a un mes con riesgo de vida”.
La fiscalía de Tránsito indicó además que el adelanto del informe técnico de Policía Científica confirmó la presencia de una huella de derrape por parte del rodado conducido por Díaz. Por ello, el fiscal dispondrá que se realice una pericia mecánica para intentar determinar la velocidad a la cual circulaba. “Científica confirmó además la pérdida del dominio del rodado por parte de Díaz”, se informó oficialmente.
Por otra parte, el examen toxicológico al que fue sometido Díaz arrojó resultado negativo para estupefacientes y positivo para benzodiacepinas (oxazepam) aunque, por el método de análisis empleado, no pudo confirmarse que hubiera estado bajo sus efectos al momento del hecho o si eran de vieja data. Ante esto se ordenaron exámenes complementarios.
Díaz también fue imputado por portación ilegal de arma de guerra por el fiscal Oscar Malla de la Unidad Fiscal de Delitos no Especializados ya que en el auto llevaba una pistola Bersa 9 mm cuyo permiso estaba vencido.
