La inseguridad golpea cada vez más fuerte en distintas partes del país y la provincia de Córdoba vive uno de los momentos más complejos en esta materia. La crisis es tan profunda que casi nada ni nadie se salva de los delincuentes, tal como ocurrió en una capilla durante plena misa.
El hecho el domingo pasado en el barrio Los Plátanos y en pleno horario de misa en la Iglesia San Juan Bautista. Allí entraron ladrones durante el oficio religioso y sustrajeron sanitarios. Aquellos que no pudieron arrancar fueron, literalmente, destruidos.
“Hay mucho miedo y la gente dejó de venir a misa”, advirtió Héctor Sayago, un colaborador de la parroquia. “No entendemos el por qué hacen este tipo de cosas ya que los baños de la parroquia son baños públicos y cuando está abierta lo puede usar cualquier persona. Vengan o no a misa. Vos podés pasar por la calle y lo usás. No se entiende bien”, agregó.
Según lo detalló Sayago a ElDoce, los feligreses tuvieron que dejar de hacer varias actividades programadas por la capilla, debido a la falta de seguridad y a la creciente violencia. “La gente dejó de venir a misa porque los roban. Roban los neumáticos de los autos, las gomas de auxilio”, puntualizó el colaborador.
“No sabemos qué hacer. Ahora debimos suspender un encuentro de catequesis donde concurren unos 100 chicos, por falta de sanitarios”, se lamentó. “Rompieron e hicieron daño. Hay necesidades, pero esto es dañino. Más allá del robo que obviamente perjudica nuestra actividad, rompieron cosas por romper. Nos llevamos una desagradable sorpresa”, cerró.
No obstante, las manifestaciones de inseguridad no se limitan a estos tipos de robos: hace poco más de una semana dos familias se enfrentaron a los tiros sobre la calle Gaona al 1400. Fue una pelea a tiros de una de las facciones de Belgrano que dejó como saldo a dos heridos de bala y un muerto.