Un intento de robo en un barrio del sur de Rosario terminó en tragedia, cuando un delincuente de 43 años murió tras caer del techo de una casa. El hombre, identificado cómo César Nicolás Zoni, sufrió graves lesiones cuando intentó huir luego de ingresar a la propiedad.
Fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez y, en la madrugada, se confirmó su fallecimiento. Horas después del suceso, su padre se acercó a la casa afectada y le ofreció disculpas a las víctimas de la entradera.
El episodio ocurrió la noche del lunes, cuando el ladrón ingresó a una vivienda en la intersección de las calles España y Doctor Riva, en el barrio Matheu. Según una de las víctimas del intento de robo, ella y su familia estaban cenando cuando comenzaron a escuchar ruidos externos. Al verificar, vieron al hombre caer al patio de su casa, mientras pedía ayuda con la intención de desviar sus motivos.
“Atrás hay un quincho con techo de chapa que tienen los vecinos. Cuando nos dimos vuelta vimos algo que caía. Los perros empezaron a ladrar y cuando nos asomamos vimos al muchacho que se bajó por la pared desde casi cuatro metros. Cayó y lo único que gritaba era ‘ayúdenme, me quieren matar’. Cuando lo vimos, cerramos todo y salimos”, comentó a Canal 3 Andrea, una de las víctimas.
En medio del caos, la mujer llamó a la Policía y el sospechoso comenzó a destrozar objetos en su intento de escapar. “Estaba muy pasado, se rociaba con el gas de la garrafa, le salía espuma por la boca y tenía los ojos radioactivos. La Policía lo sacó y lo metió en un patrullero”, relató Andrea.
La policía llegó rápidamente al lugar y lo trasladó en un patrullero al hospital. “Cuando lo sacaron, se tiró en el piso del auto y se pegaba en la cabeza mientras gritaba. Estaban esperando al SIES y no lo podían calmar”, agregó. Finalmente, el sujeto no logró sobrevivir.
El caso está siendo investigado por el fiscal Luis Schiappa Pietra, quien ordenó una autopsia y otras pericias para determinar si las lesiones de Zoni fueron consecuencia de la caída o si hubo algún otro factor involucrado. A su vez, el fiscal tendrá en cuenta las declaraciones de la víctima, quien relató que el delincuente se golpeaba solo. También dispuso la toma de testimonios, el relevamiento de cámaras de seguridad y el análisis de rastros en la zona para completar la investigación.
Claudio, el padre del delincuente, apareció para pedir perdón por lo ocurrido. “No hay un libro que enseñe a ser padre y en algo me debo haber equivocado. Uno se espera este final porque, cuando andan torcidos, se sabe que algo va a pasar”, expresó.
En el mismo hilo, Andrea respondió: “Yo sé que no tienen la culpa porque una persona con problemas de droga no tiene solución si no quiere recomponerse. La señora y la hija (familiares de Zoni) son buenísimas, muy amables y trabajadoras”.