La defensa del neurocirujano Leopoldo Luque, uno de los principales imputados en la causa por la muerte de Diego Maradona, pidió hoy la nulidad de la junta médica que realizó el informe sobre el fallecimiento del exfutbolista, al considerar que los peritos designados oficialmente “no fueron imparciales” y que, al menos tres de ellos, debieron excusarse y no participar en la medida.
En un escrito presentado ante el juez de Garantías 2 de San Isidro, a cargo de Orlando Díaz, el abogado defensor de Luque, Julio Rivas, planteó además la conformación de una nueva junta médica para realizar otro peritaje “con peritos independientes” de la “academia de medicina y/o los peritos de la Corte Suprema de Justicia”.
La junta médica presentó sus conclusiones el pasado 3 de mayo a los fiscales a cargo del caso Patricio Ferrari, Cosme Iribarren y Laura Capra, y concluyó que Maradona era un paciente con pluripatologías que agonizó 12 horas antes de morir a los 60 años el 25 de noviembre.
Además, consideró que “el Diez” “no estaba en pleno uso de sus facultades mentales”, que el operativo montado en la casa de del barrio San Andrés de Tigre no era una internación domiciliaria y que pudo haber tenido “más chances de sobrevida” si hubiera estado en una clínica.
También calificó al equipo médico como “deficiente”, “temerario” e “indiferente” ante la posibilidad cierta de su muerte y que lo abandonaron “a la suerte”.
Sin embargo, al igual que las defensas de la psiquiatra Agustina Cosachov y del psicólogo Carlos “Charly” Díaz, ambos imputados en la causa, el abogado Rivas, defensor de Luque, planteó sus disidencias y reclamó que sea declarado nulo.
“Las diferencias entre los peritos oficiales y los propuestos por esta defensa son muy notorias”, por lo que se solicita “la nulidad del informe presentado por los peritos oficiales”, comienza el escrito que, ahora, deberá evaluar si hace lugar o no el juez Díaz.
El abogado planteó que tres peritos debieron excusarse de participar en la medida, entre ellos el jefe de la morgue de San Isidro, el médico legista Federico Corasaniti, quien fue el coordinador de la junta médica y, según la defensa, ya había sido testigo en la causa porque fue quien realizó la autopsia al cuerpo de Maradona.
Además, considera que los peritos designados de manera oficial “no fueron imparciales” y que “la mayoría de ellos son funcionarios policiales” y que participaron en la autopsia, con lo que sugirió que respondían a los intereses de Mario Baudry, querellante en la causa por el hijo de Maradona, Diego Fernando, entonces jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad provincial.
“Con asombro hemos notado que todos los peritos oficiales se han alineado a los dichos que viene sosteniendo el abogado Mario Baudry como particular damnificado, sin que exista una sola disidencia entre los once médicos designados en los 24 puntos de pericia”, dice el escrito.
Respecto al informe presentado por la junta médica, el letrado “objeta, impugna y tacha de nulas todas y cada una de las consideraciones expresadas por los peritos oficiales, ya que las mismas son absolutamente arbitrarias, tendenciosas, completamente faltas de objetividad y que fueron realizadas con el propósito de inculpar lisa y llanamente a mi defendido”.
“Existen en el dictamen irregularidades que afectan su eficacia”, dice el escrito presentado por el abogado Rivas, en el que asegura que los peritos oficiales “confunden a los fiscales” y que “violaron las formalidades prescriptas para su realización”.
Además, el defensor realizó un detalle de la impugnación de cada una de las conclusiones formuladas por los peritos en el informe de la junta médica que consta de 70 páginas.
El equipo de investigadores coordinado por el fiscal general de San Isidro, John Broyad, se tomará unos días más para analizar las conclusiones de la junta y, en base a ellas, formular la imputación para los llamados a indagatoria.
Según las fuentes, el equipo fiscal no sólo evalúa agravar la calificación penal, sino que también podría sumar nuevos imputados del entorno no médico de Maradona.
Aparte de Luque (39), Cosachov (35), Díaz (29) y la enfermera Gisela Dahiana Madrid (36), los otros tres profesionales de la salud imputados en la causa son el enfermero Ricardo Omar Almirón (37); la médica que coordinaba la internación domiciliaria para la prepaga Swiss Medical, Nancy Forlini (52); y el coordinador de los enfermeros, Mariano Perroni (40).