La Justicia procesó sin prisión preventiva a Marcelo Corazza, productor y ganador del reality Gran Hermano, por el delito de corrupción de menores. Otras tres personas investigadas seguirán detenidas por el mismo caso.
Así lo determinó este lunes el juez Javier Sánchez Sarmiento.
Corazza quedó procesado sin prisión preventiva por el delito de corrupción de menores en concurso de ideal con exhibiciones obscenas a una víctima de 13 años.
Además, Corazza fue embargado en 2 millones de pesos según la misma resolución y seguirá siendo investigado en el marco del expediente. Pasó 10 días en el penal de Ezeiza. Esperará el proceso del juicio en libertad.
No corrió la misma suerte para otros tres hombres vinculados al caso de explotación infantil, que seguirán tras las rejas al cumplir con la prisión preventiva. El grupo trasladaba con engaños a niños desde Misiones a Buenos Aires para someterlos a una red de pederastas.
Andrés Fernando Charpenet (53), Raúl Ignacio Mermet (45) y Francisco Rolando Angelotti Notarbartolo (46, el principal acusado de liderar la banda) fueron procesados con prisión preventiva por los delitos de “asociación ilícita, trata de personas agravado por la cantidad de víctimas, perpetrado en contra de menores de 18 años y aprovechándose de su situación de vulnerabilidad, abuso sexual continuado con acceso carnal, gravemente ultrajante, perpetrado en contra de menores de trece años, promoción de la prostitución de menores de dieciocho años, pornografía infantil y corrupción de menores de trece años”, todos ellos en concurso real entre sí. Es decir, que ocurrieron a la vez.
La investigación comenzó el 24 de octubre del año pasado -a una semana de iniciado el último ciclo de Gran Hermano-, luego de que un testigo de identidad reservada denunció que había sido abusado sexualmente cuando él tenía entre 11 y 13 años, entre 1999 y 2002, por uno de los ahora detenidos, a quien solo podía individualizar por su nombre de pila y que luego lo hizo tener relaciones sexuales con otros de los acusados.
Los imputados, como parte de su plan para lograr la confianza y la captación de la voluntad de sus víctimas, los invitaban a viajes, les compraban ropa o les conseguían trabajos, detallaron las fuentes.
Algunas de las víctimas eran captadas en plazas, otras en sitios de chats en internet y hasta hay mencionada una escuela de teatro en un centro cultural del barrio de Almagro.
En la causa, Corazza está mencionado en un solo hecho ocurrido, según la víctima que lo denuncia, “luego de 2001″, cuando ya había ganado el reality y lo llevó en su auto particular hasta la Costanera Sur, donde se dio una situación de abuso.