La Dirección Nacional de Migraciones, dependiente del Ministerio del Interior que conduce Wado de Pedro, dispuso la expulsión del país con prohibición de reingreso permanente a Joaquín “Paisa” Aquino, de nacionalidad paraguaya, vinculado a la causa de la cocaína envenenada.
Aquino había sido detenido en la madrugada del jueves por la Policía Bonaerense en José C. Paz, acusado de ser parte de una banda de narcotraficantes sospechada de vender la cocaína envenenada que mató a 23 personas.
El acusado se negó hoy a declarar en su indagatoria en la Justicia federal de Tres de Febrero. Aquino está imputado de los delitos de tráfico de drogas y tenencia ilegal de armas, ya que se le encontró una pistola Glock con la numeración limada en su domicilio.
Ahora, la decisión quedó en manos del juez federal Juan Manuel Culotta, quien lleva adelante la instrucción de la causa, junto al fiscal Miguel Blanco Aquino. Ambos decidieron que, al menos por ahora, Aquino siga detenido.
La medida de expulsión se hizo efectiva esta tarde, cuando personal de la DNM entregó la notificación con la que se dispuso la expulsión en la sede de la DDI La Matanza, para ser elevada al juez de la causa.
Cumplido el trámite la titular de Migraciones, Florencia Carignano, aseguró que “desde Migraciones se había negado la residencia a Aquino y se lo había expulsado del país con prohibición de reingreso por 8 años, aunque la medida no pudo hacerse efectiva ya que el mismo se encontraba prófugo de la Justicia”.
“La decisión del organismo migratorio se debió a que Aquino tenía condenas por tenencia ilegal de arma de guerra y por tráfico de estupefacientes en su modalidad de tenencia con fines de comercialización”, explicó Carignano.
Asimismo, la funcionaria precisó que “la Dirección Nacional de Migraciones dictó la expulsión del país y prohibió el reingreso a Joaquín Aquino, ahora de forma permanente, decisión que se hará efectiva cuando cese el interés de la Justicia sobre la persona”.