El Ministerio Público Fiscal y el Ministerio de Salud de la provincia llevaron a cabo una investigación en conjunto sobre dos geriátricos ubicados en diferentes departamentos de Mendoza, luego de que fueran denunciadas dos muertes en la sede de Godoy Cruz, la cual ya había sido previamente clausurada y funcionaba de manera clandestina desde diciembre. La institución de Malargüe fue cerrada hoy y dos residentes fueron llevados al hospital. Por la causa quedaron cinco aprehendidos.
Durante la mañana de este jueves, el geriátrico conocido como Hogar Nuevo Renacimiento, ubicado cerca de la plaza de Godoy Cruz sobre la calle Manuel Moreno, fue foco de allanamientos por parte de la Fiscalía de Homicidios que abrió una causa para investigar las muertes.
La investigación tuvo su génesis luego de una denuncia particular sobre la muerte de una mujer que residía en la sede de Godoy Cruz. A los días el mismo lugar registró otra muerte y los sabuesos buscaron profundizar la causa a partir de la hipótesis de que ambos adultos mayores habrían muerto por negligencias en el accionar del personal del geriátrico.
Es por ello, que la fiscal de Homicidios Claudia Ríos Ortíz, quien lidera la pesquisa, ordenó una serie de operativos en los que aprehendieron al matrimonio dueño de los geriátricos, una médica y dos asistentes. Fuentes consultadas aseguraron que los cinco involucrados podrían ser imputados en las próximas horas por “abandono de persona seguido de muerte”, un delito que conlleva entre 5 y 15 años de cárcel.
Inhabilitados y reabiertos
El geriátrico de Godoy Cruz había sido clausurado previamente, pero no por la denuncia de las muertes, sino por una inspección de rutina que el Ministerio de Salud de Mendoza había hecho en mayo de 2022.
En aquel momento, los inspectores se encontraron con que la institución privada dedicada al cuidado de adultos mayores no tenía la habilitación correspondiente y que además presentaban algunas irregularidades muy llamativas como la falta de personal médico en el establecimiento, a pesar de que las historias clínicas estaban firmadas por diferentes galenos.
Fue por ello que los dueños habían sido emplazados y tras meses de no presentar los requerimientos pedidos por Salud, el 13 de diciembre pasado procedieron a la clausura del geriátrico. Pero la hipótesis que sostienen los investigadores, es que los dueños reabrieron la institución, le cambiaron el nombre a Hogar Años de Plata y continuaron de manera clandestina.
“Lo que faltaba puntualmente era la aceptación del director técnico -que suele ser siempre un médico- ante el ministerio de Salud. Al no cumplir con esto, automáticamente pasamos a la clausura”, aseguró a la prensa Roberto Campos, jefe de Gabinete del Ministerio de Salud.
En cuanto al hogar ubicado en la ciudad de Malargüe, el mismo fue allanado hoy. Allí había 16 adultos mayores, los cuales fueron llevados al hospital local para controlar su estado de salud y dos de ellos quedaron ingresados para mayor observación, pero desde el ministerio destacaron que no corren peligro.
Qué pasará con los residentes
En cuantos a los adultos mayores que residían en cada uno de los geriátricos, desde el Ministerio de Salud debieron notificar a los familiares sobre lo que estaba ocurriendo para pedirles que los mismos fueran reubicados en lugares que contaran con buenas condiciones, ya sea una vivienda u otro geriátrico.
“El tema de los abuelos para nosotros es muy importante, se les avisó a los familiares para que se hagan cargo y poder reubicarlos donde consideren que sea mejor para ellos. Siempre de manera privada, ya que el Estado no buscará ubicarlos en instituciones estatales, porque la familia es la responsable”, explicó Campos.