La autopsia a Lian Torelli, el niño de 12 años que apareció muerto en la ciudad bonaerense de Salto, reveló que falleció ahogado. De acuerdo al informe preliminar de los forenses de Chivilcoy, no se observaron “signos de defensa”, por lo que los investigadores descartaron que se trate de un “hecho violento”.
El análisis, detalló la Agencia Noticias Argentinas, sostiene que Lian murió como consecuencia de una “sumersión”, al tiempo que “la data de muerte coincide con el que ya no lo vieron en el balneario”. El cuerpo de la víctima se encontraba atascado en el agua, entre pedazos de mampostería y hierros, agrega el informe. El menor había sido visto por última vez el pasado domingo, en la zona del balneario municipal, un lugar que frecuentaba con familiares y amigos.
Según afirmó la madre del chico, éste iba a ir desde allí hasta la casa de su padre, pero nunca llegó a destino. En el operativo de búsqueda trabajaron más de 170 efectivos y contaron con la colaboración de drones, canes, helicóptero, buzos, rescatistas y un gabinete de psicólogos.
La causa está a cargo del fiscal Lisandro Masson, titular de la Unidad Fiscal de Instrucción (UFI) número cuatro del Departamento Judicial de Mercedes. Salto es una pequeña ciudad de 25 mil habitantes, ubicada a unos 190 kilómetros al noroeste de la Ciudad de Buenos Aires.
El padre del menor expresó su dolor y tristeza por la muerte de su hijo en su cuenta de Facebook: “Te voy a extrañar mucho mi loco de papá. Es un día muy doloroso papito mío”. Luego, la carta continúa: “Dios te me cuide siempre, hijo, mi pescador, no lo puedo creer, pero te amo y siempre vas a estar en mi corazón mi loco Lian”. En la publicación, Juan Torelli subió diversas imágenes junto al niño y en tan solo minutos se llenó de comentarios de familiares, cercanos, amigos y desconocidos.