Una policía de 23 años fue detenida en la localidad bonaerense de Berazategui acusada de matar de un balazo en la cabeza a su novio. Al llamar al 911, la presunta homicida manifestó que el hombre se había suicidado.
El hecho se remonta a enero de este año, cuando a las 4 de la madrugada, Micaela Gómez de Olivera (23) avisó a la Policía -"Mi pareja se suicidó", dijo ella- sobre la muerte de su concubino, Damián García. Al ingresar en la vivienda, los efectivos hallaron el cuerpo del joven que yacía en el patio y presentaba un orificio de bala sobre la sien lado derecho.
En una primera etapa, la causa quedó rotulada como “averiguación de causales de muerte”, pero con el correr de los meses la situación cambió drásticamente. La novia del fallecido fue detenida este miércoles, como principal autora del homicidio.
Es que las pericias efectuadas sobre García y sobre la pistola -que era el arma reglamentaria de Olivera- llevaron a que el fiscal Ernesto Ichazo de la UFI 1 de Berazategui, ordenara un allanamiento en la casa donde vivía la policía desde que sucedieron los hechos. Ahora, la mujer está acusada de perpetrar un “homicidio calificado por el vínculo”, según informó Crónica.
Gómez había egresado en noviembre de la Policía Federal Argentina y actualmente prestaba servicio en la División Homicidios. En la causa, la presunta asesina declaró que el hombre había vuelto a la vivienda alcoholizado en una moto y que le había dicho que no quería separarse. Según su explicación, “él se suicidó porque le dije que quería separarme”.
De acuerdo con las fuentes allegadas al caso, “el hombre era zurdo y el disparo lo habría hecho con la mano derecha, pero lo más dudoso es que la pistola quedó entre sus piernas y con el seguro puesto. Era prácticamente imposible que se matara él, por la caída contra el piso”.