Con un cambio de imputación más benigna, el caso del policía federal que ultimó a un automovilista en el centro de la Ciudad, va camino a cerrarse con un juicio abreviado con una pena de 3 años en suspenso.
En un momento todo hacía pensar que la muerte de Facundo “Kako Martínez” (43) se había tratado de un caso de “gatillo fácil” ya que la fiscal de Homicidio Adndrea Lazo le impuso al uniformado la imputación de “homicidio agravado por ser miembro de una fuerza de seguridad”, delito que tiene como única pena la prisión perpetua.
Pero en las últimas horas el caso tuvo cambio drástico. La fiscal cambio la imputación a “homicidio en exceso de legítima defensa”, delito que tiene penas que van de los 6 meses a los 5 años de prisión.
Con esta nueva calificación, la fiscal y Carlos Moyano, abogado defensor del uniformado, convinieron hacer un juicio abreviado que se realizará en los próximos días y que cuenta con el acuerdo de Pablo Cazabán, abogado de la familia de la víctima. Así la cosas, el policía recibirá una pena de 3 años en suspenso e inhabilitación de su cargo por 5 años.
El cambio de calificación se entiende a la luz de cómo fue el accionar del policía federal de 31 años, algo que fue confirmado por los registros de las cámaras de seguridad de la zona.
Según consta en el expediente, el jueves 18 de febrero pasado, “Kako” Martínez se encontraba a bordo de un Ford Mondeo, estacionado en doble fila, en Federico Moreno y Catarmarca de Ciudad.
La situación llamó la atención de dos policías federales de civil –un hombre y una mujer- que decidieron identificarlo. El policía se puso delante del auto que estaba en marcha y la mujer, en el costado del vehículo, cerca de la ventanilla del acompañante.
En ese momento Martínez decide arrancar, el policía evitar ser atropellado saltando por el capot, golpeándose y quedando finalmente en el costado del vehículo por el lado del ventanilla del conductor que opta por detener la marcha. En ese momento el uniformado hace un disparo de advertencia. Entonces Martínez se agacha, el federal, sospecha que va a sacar algo de entre los asientos y es en ese instante que dispara. La pericia indica que el disparo fue descendente y que la bala comprometió los pulmones y el corazón.
Aun así, Martínez, ya herido mortalmente, arranca y alcanza a recorrer unos 100 metros. El auto choca contra un Peugeot que estaba estacionado en Salta y Catamarca y termina en la acequia con el conductor ya sin vida.
