Nahir Galarza, la joven de 22 años condenada a prisión perpetua por asesinar a su novio Fernando Pastorizzo, sumó otra pelea a su historial en la cárcel. Esta vez, una directa consecuencia del uso del celular y los románticos posteos en Facebook con su nueva pareja, Matías Caudana, realizados días atrás.
El conflicto explotó la semana pasada en la Unidad Penal N°6 de Mujeres de Paraná (Entre Ríos), donde Galarza está alojada por el resto de su vida. Según indicó Infobae, las compañeras se enojaron con la joven porque supuestamente ella las mandó al frente por el uso indebido de los teléfonos celulares.
“Se la querían comer cruda”, sintetizó un allegado a la familia Galarza.
Tras la presunta denuncia que hizo Nahir, las autoridades del penal decidieron secuestrar todos los celulares de las reclusas. Sin embargo, la abogada de Galarza, Raquel Hermida Leyenda, desmintió categóricamente que su defendida haya sido la “soplona”.
“Las internas fueron engañadas por la unidad penitenciaria. Les dijeron que les secuestraban los celulares porque habían posteado fotos en las redes. Esto le genera un problema a Nahir con el resto de la población carcelaria y ella no tuvo nada que ver”, insistió la letrada.
A Nahir, además de quitarle el teléfono -estaba autorizada-, la obligaron a comunicarse con sus padres solamente a través del teléfono fijo de la cárcel. Para más castigo, le prohibieron algunas actividades: dos talleres literarios. Por último, le redujeron a una hora el uso de la computadora para estudiar psicología y música.
“Pareciera que quieren que se quede encerrada y no quiera estudiar o hacer actividades para incorporar conocimiento”, agregaron desde el entorno de la familia de la joven.
Nahir Galarza: pelea con la funcionaria narco, denuncia de acoso e intento de fuga
Varias veces, Galarza ha sido noticia por sus problemas en el interior del penal de Paraná.
Uno de los casos más recordados es el de su pelea con Griselda Bordeira, una exagente policial y funcionaria municipal condenada por narcotráfico. Según trascendió en noviembre de 2018, ambas mujeres se enfrentaron por unos auriculares. Incluso, horas después, Bordeira dijo que alguien le colocó lavandina en el agua mineral.
En 2019, Nahir Galarza denunció que una reclusa intentó acosarla sexualmente. Sobre la compañera dijo: “Durante mucho tiempo estuvo atrás mío, se me tiraba. Al principio yo pensé que estábamos jodiendo porque teníamos una muy buena relación de amigas, hacíamos todo juntas. Estamos en el mismo pabellón. Después ella se empezó a confundir y yo le aclaré que estaba todo bien, me encantaba ser su amiga, pero que a mí me gustan los chicos. Entonces se enojó y se cortó la relación”.
También se habló de un intento de fuga de Galarza. Una de las celadoras descubrió un muñeco de trapo. Las autoridades sospecharon que era una broma para otra interna o que el maniquí ocuparía el lugar en la cama de la joven para que no notaran su ausencia.