La Policía de Mendoza secuestró 165 teléfonos robados en el barrio Lihué de Guaymallén y detuvo a un hombre que se dedicaba a desbloquearlos para luego venderlos. Además se encontraron computadoras y dinero.
El martes, personal de la Unidad de Cibercrimen, trabajando sobre casos de teléfonos robados o hurtados, detectó que un aparato se había activado en Guaymallén. Por eso, junto a efectivos de la Unidad Investigativa de Guaymallén se dirigieron al lugar señalado: la manzana 30 de la populosa barriada.
Allí se detuvo a Gastón Gabriel Mallón, de 26 años. El hombre, según los investigadores, se encargaba de comprar teléfonos que habían sido robados, los desbloqueaba y luego los comercializaba.
En la vivienda allanada se encontraron 165 teléfonos celulares de distinta marca y características, 35 notebooks, 6 tablets, 1 iPad, 3 PlayStation 4, un posnet y 700.000 pesos. El procedimiento fue presentado en la Fiscalía de Robos y Hurtos.