Siete presos se fugaron de una comisaría en Haedo, Buenos Aires. Al parecer, los sujetos limaron los barrotes de su calabozo y escaparon por los techos de las casas de esa localidad. En plenos festejos de Año Nuevos, nadie advirtió la situación.
El insólito episodio ocurrió a las 4 de la mañana del primer día de 2022, en la celda 2 de la comisaría 2° de Morón. El Ministerio de Seguridad desafectó a tres policías, mientras buscan intensamente a los prófugos.
El calabozo estaba superpoblado: según informaron fuentes del caso a Clarín, había 26 personas cuando tiene capacidad para 12.
Tras limar tres barrotes de dos rejas superpuestas entre sí, se fugaron por los techos de las casas lindantes, en Tacuarí al 600, en esa localidad del oeste bonaerense.
La situación salió a la luz cuando el imaginaria -el encargado de vigilar el calabozo- se acercó a la celda y constató que apenas quedaban cinco personas en su interior.
Los fugados fueron identificados como: Manuel Ignacio Caruzo Vera, Cristian Mario Fleitas, Brian Pedro Iparraguirre, Cristian Palavecino Ramírez, Leandro Nahuel Ramos, Lucas Antonio Medina y Dylan Joel Ovando. Este sábado a la noche aún no habían logrado recapturarlos.
La mayoría de ellos se encontraban detenidos por el delito de robo calificado. De acuerdo a Oeste Noticias, Ovando está acusado de secuestro extorsivo, mientras que sobre Medina pesan carátulas de robo agravado por el uso de arma de fuego y tenencia ilegal de arma de fuego.
Interviene en la causa por el delito de “evasión” personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 del Departamento Judicial de Morón, que dispuso que las actuaciones fueran realizadas por agentes de Gendarmería, según Télam.
Según las primeras pericias, los barrotes habían sido cortados recientemente.
Mientras avanza la investigación, la Auditoría General de Asuntos Internos (AGAI) del Ministerio de Seguridad bonaerense dispuso desafectar a tres policías: el jefe de turno, al oficial de servicio y al imaginaria.