Los vecinos de Villa Diamante, un barrio en el partido bonaerense de Lanús, está entristecidos por la trágica muerte de Morena Domínguez, una niña de 11 años que fue víctima de un violento asalto. Ahora, los detalles de la investigación arrojaron una luz perturbadora sobre la brutalidad de los delincuentes detrás de este crimen, desvelando su aberrante maniobra con el celular robado.
La fiscal Silvia Bussano, al mando de la investigación, demoró a siete integrantes de una banda de delincuentes que operaban en motos y aterrorizaban a los residentes de Villa Giardino. La banda fue vinculada al homicidio de Morena, cuya muerte se produjo debido a los golpes sufridos durante el asalto. La niña fue brutalmente atacada cerca de su escuela, la escuela Almafuerte, en Molinedo al 3200, un hecho que conmocionó a todos.
Los agresores, captados por una cámara de seguridad de una librería cercana, fueron grabados golpeando a Morena y arrastrándola mientras le robaban su celular. La autopsia reveló que la causa de su muerte fue un “fuerte golpe abdominal que le provocó una hemorragia interna”.
QUÉ HICIERON LOS DELINCUENTES CON EL CELULAR DE MORENA:
Dos de los sospechosos, identificados como Miguel y Darío Madariaga, ambos mayores de edad y hermanos, fueron detenidos en Pompeya después de cambiar el celular robado a Morena por paco, según informó La Nación. La moto utilizada en el ataque habría sido encontrada en posesión de Miguel. Aunque un adolescente de 14 años había confesado previamente su participación en el crimen, no fue detenido debido a su estatus de menor no punible, según la ley.
Este joven había estado involucrado en numerosos robos en la zona y en Lomas de Zamora, siendo detenido varias veces anteriormente. A pesar de sus múltiples detenciones, su edad lo eximió de enfrentar consecuencias legales más severas, generando preocupación sobre el manejo de la justicia en casos de menores delincuentes.
En este sombrío contexto, surgió la sorprendente afirmación de que la diputada nacional Natalia Zaracho, referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos liderado por Juan Grabois, habría intentado evitar el arresto del joven delincuente en marzo pasado.