A pesar de los múltiples atenuantes que planteó su abogado, seguirá preso el joven que mató a su hermano en General Alvear hace un mes. La fiscalía dio un paso importante y logró la prisión preventiva, en un caso donde se ha especulado con la inimputabilidad del agresor.
José Luis Ledezma (24) fue asesinado de una puñalada la mañana del 12 de septiembre, minutos después de regresar de una “juntada” que había compartido con su hermano, Carlos Ariel (22). Habían pasado la madrugada tomando bebidas alcohólicas y, seguramente, por el estado de ebriedad en el que se encontraban se desató una violenta discusión.
Alrededor de las 7, ya en el domicilio familiar de calle Las Heras, en Bowen, el menor de ellos tomó un cuchillo y se lo asestó al otro joven en el abdomen. El atacante huyó, mientras que la víctima fue auxiliada por parientes que lo llevaron al hospital Enfermeros Argentinos, donde ingresó sin vida.
Búsqueda, captura e imputación
Con la intervención policial comenzó la búsqueda de Carlos Ledezma, quien fue atrapado 36 horas después. Hubo importantes operativos y hasta la utilización de uno de los helicópteros de la Fuerza para dar con él, quien fue localizado en una finca de Calle 22. Rodeado por efectivos, el sospechoso se subió a un árbol y tardó varios minutos en bajar.
Una vez detenido, y prácticamente sin dudas de su autoría en el crimen, se presentó la duda sobre si era inimputable. Su padre presentó un certificado que dejaba constancia de un leve retraso mental.
Esto hizo que el fiscal Martín Castro solicitara con urgencia la evaluación de peritos psiquiátricos, quienes confirmaron que Ledezma comprende sus actos. Frente a esto fue imputado por homicidio simple, con penas de 8 a 25 años.
Esta semana la causa tuvo otro contrapunto y fue la audiencia de prisión preventiva. La fiscalía pidió que el detenido siga en la cárcel de San Rafael, en tanto que la defensa sugirió algún beneficio, como la domiciliaria.
El representante del acusado esgrimió que no está probada la intención homicida, que quizás su cliente se defendió y que no hay riesgos de fuga, a pesar de estar casi dos días prófugo. Sobre esto último, el abogado justificó el escape por el estado de shock del imputado, por la borrachera y por su retraso mental.
Nada de esto tuvo peso para el juez Santiago Barroso, quien ordenó que el autor del hecho permanezca en la penitenciaría. Todo indica que el fraticidio de Alvear tendrá un rápido esclarecimiento.