Son militantes kirchneristas dos de los seis jóvenes acusados de violar grupalmente a una mujer en el barrio porteño de Palermo. En medio de la conmoción, la agrupación decidió expulsarlos y mostrar su acompañamiento a la víctima del abuso sexual.
Ignacio Retondo y Lautaro Ciongo Pasotti, dos de los detenidos por el abuso sexual sucedido dentro de un auto, militaban en la agrupación K llamada “Lealtad Corriente Militante Vicente López”.
A través de un comunicado, la organización política repudió el episodio. El concejal del Frente de Todos, director de la UGL VIII de PAMI y referente de la agrupación K, Lucas Boyanovsky, declaró: “Queremos expresar nuestro mayor repudio a quienes cometieron este acto delictivo que atenta sobre uno de los principios fundamentales de nuestra organización política que es la tolerancia cero a todos los tipos y modalidades de violencias por razones de género”.
También, la agrupación se puso a disposición de la mujer víctima del abuso. “Nos ponemos a disposición de la persona que sufrió estos hechos, de sus amistades y de su familia, como también lo hacemos con cada situación de violencia de género”, expresaron.
“Somos implacables en nuestro posicionamiento, no permitiremos que alguien que haya ejercido una de las formas más extremas de la violencia de género como lo es la violencia sexual continúe participando en actividades de nuestra organización”, señalaron desde la agrupación K, confirmando así la expulsión de Retondo y Ciongo Pasotti.
Quiénes son los detenidos por el abuso sexual en Palermo
Los seis jóvenes detenidos son Lautaro Dante Ciongo Pasotti (24), Ignacio Retondo (22), Franco Jesús Lykan (24), Ángel Pascual Ramos (23), Tomás Fabián Domínguez (21) y Steven Alexis Cussoni (20). Todos están domiciliados en Ciudad y Provincia de Buenos Aires. Quedaron detenidos en una comisaría de la Policía de la CABA y están a disposición del Juzgado 21 con la imputación de abuso sexual agravado (violación).
Natalia, dueña de una panadería del lugar, fue la persona que alertó al 911 apenas descubrió que la chica era abusada dentro de un auto en Serrano al 1.300, el lunes pasado. Logró rescatarla antes de que llegara la Policía.
“Fuimos mi marido y yo quienes socorrimos a la chica. Tenemos una panadería y desde adentro veíamos lo que pasaba en el auto. Primero pensábamos que era una pareja que estaba teniendo sexo, pero luego vimos que en el vehículo había otros tres jóvenes, que la manoseaban, que la agarraban de los brazos, que la obligaban a practicarles sexo oral, y salimos a ayudarla”, explicó a Télam la comerciante.
Después del llamado, la panadera salió junto a su esposo. Juntos lograron sacar a la joven del interior del auto y la notaron en estado de shock, con la ropa interior baja y golpeada.
“No escuché gritos, la chica no gritaba, no tenía ni fuerzas para gritar. Todos abusaron de ella, eran como animales”, describió.