Tres hermanitos murieron esta mañana en un devastador incendio que destruyó su precaria casa en Tunuyán. Las víctimas fatales tenían 7, 9 y 13 años, confirmaron fuentes policiales.
Los menores en la vivienda siniestrada eran cuatro. Además de los tres nenes fallecidos, estaba otra hermana de 11 años que logró escapar de las llamas, aunque sufrió quemaduras en su rostro y brazos y fue trasladada por vecinos al hospital.
Los cuatro hermanos habían quedado solos en la vivienda cuando comenzó el voraz incendio. Su papá estaba trabajando y su mamá había salido temprano hacia el hospital de Tunuyán junto a otra hija, detallaron las fuentes consultadas.
Las víctimas fatales fueron identificadas como Cesar (7), Santino (9) y Ángel (13), todos de apellido Funes. Mientras que la menor herida, que luego fue trasladada al hospital Notti, se llama Florencia.
Las alarmas se encendieron a las 8.20 cuando la casa de la familia Funes, ubicada en la finca Corso, en calle Calderón, comenzó a ser consumida rápidamente por las llamas.
La velocidad con la que creció el incendio imposibilitó la reacción de los hermanitos, quienes fueron hallados sin vida calcinados y debajo de los escombros que dejó el destructor siniestro.
Florencia, la única sobreviviente, pudo escapar con graves quemaduras. Fue socorrida por vecinos. “La casa ya estaba totalmente tomada por el fuego”, aseguraron. La nena fue trasladada en un auto particular hasta el hospital Scaravelli con quemaduras en el rostro y en sus brazos.
Allí, fue asistida en primera instancia y, debido a la gravedad se sus lesiones, se decidió el traslado al hospital Humberto Notti.
A los pocos minutos del primer llamado llegaron al lugar bomberos del Cuartel Central y Voluntarios de Tunuyán. En solo 10 minutos lograron sofocar el fuego, pero la destrucción de la construcción ya era total.
Tras esto, los rescatistas ingresaron a la vivienda en ruinas y encontraron los cuerpos de los 3 hermanitos.
La madre de los nenes, Lorena, confirmó que los chicos estaban solos ya que ella había llevado a su otra hija al hospital y el padre había salido temprano a trabajar.