Después de que Cristina Kirchner descartara la idea de presentarse a la candidatura en 2023, Alberto Fernández indicó que él tampoco está pensando en postularse el año que viene para un segundo mandato: “Con todos los problemas que usted me plantea, yo estoy pensando sólo en resolver problemas del país, no estoy pensando en la reelección”.
“La Argentina tiene una oportunidad de futuro extraordinaria. Quiero terminar mi mandato habiendo sembrado a la Argentina de oportunidades para el que me suceda o si sigo yo, no sé, tenga la posibilidad de ver germinar ese sembrado y cosechar en favor de los argentinos”, manifestó el presidente.
En diálogo con The Financial Times, el Presidente señaló la postura del Gobierno respecto a las dos grandes potencias del mundo: “Estados Unidos está muy preocupado por lo que China puede hacer en América Latina. No tenemos preferencia por China o Estados Unidos. No creo en el mundo bipolar”.
“China nos ha apoyado mucho en los últimos años con obras públicas, si la ayuda viniera de Europa o Estados Unidos sería también bienvenida, como la inversión china. No creo en el mundo bipolar. El hemisferio sur padeció la Guerra Fría y no quiero otro mundo bipolar”, aseguró el mandatario durante su participación en la sexta edición de The Global Boardroom.
Fernández dijo también que “son todas fantasías” cuando respondió a las versiones de la instalación de bases militares chinas en el sur del país y aseveró que la Argentina es “un país soberano y debe hacer lo que más le convenga”.
Sobre la consulta por la importancia de la llegada de Lula da Silva nuevamente a la presidencia de Brasil y cuál será el impacto en el aspecto comercial, Fernández postuló que “la presencia de Lula en el gobierno de Brasil a muchos de nosotros nos tranquiliza. Objetivamente Lula es un líder. Tengo un cariño entrañable con él, lo conozco hace muchos años. Me pone muy contento que sea Presidente de nuevo. Tenemos ideas muy cercanas”.
Además, abordó la cuestión económica regional y advirtió que “para Brasil y para Argentina, productores de automóviles, los únicos productores en América del Sur, es un problema ese acuerdo (con la Unión Europea)”, que fue impulsado a mediados de 2019 por las naciones del Mercosur y del conglomerado europeo, cuando todavía gobernaba Mauricio Macri.
Para entrar en vigencia, ese acuerdo requiere, por ejemplo, de ratificación parlamentaria y jurídica de las partes, una cuestión que también entró en el debate que se dio en Montevideo durante la reciente Cumbre de Presidentes del bloque regional. “Nos complica si viene la competencia a América Latina. Tenemos que sentarnos a analizar cómo llegar a un acuerdo sobre bases más realistas”, explicó. “Habría que renegociar, el tango se baila de a dos”, ejemplificó.
También reconoció los problemas con la inflación -”la duplicamos con respecto a cuando asumimos”, admitió- aunque resaltó algunos buenos indicadores de la economía doméstica como el descenso del desempleo, el récord de exportaciones y el crecimiento del consumo durante varios meses consecutivos. Resaltó que se está cumpliendo el acuerdo con el FMI por la reestructuración de la deuda externa aunque recalcó que se le sigue reclamando al organismo de crédito internacional por el pago de “los sobrecargos”.
Antes también había hablado de la potencialidad de la economía argentina si se logra una explotación adecuada de litio y del gas proveniente del yacimiento de Vaca Muerta. Sobre el litio manifestó que está en contra del extractivismo y que se pretende “agregarle un valor” para exportarlo y generar divisas para el país.