Alberto Fernández no viajará a la final del Mundial Qatar 2022 que se disputará este domingo a las 12 entre la selección Argentina y el ganador de Francia-Marruecos. Según explicaron desde el entorno del presidente, no sería el “momento indicado” para que el primer mandatario emprenda un viaje de esas características a Qatar.
Sin embargo, desde que empezó el Mundial, la comunicación presidencial evitó cualquier tipo de expresión de Alberto Fernández respecto a la participación argentina en la Copa, por temor a ser considerado “mufa”.
El presidente solo se limitó a postear fotos con su familia y la bandera argentina al finalizar los partidos (nunca antes), y sin mayores comentarios o análisis de juego. Algo doblemente llamativo, dado que Alberto Fernández es fanático del fútbol y en muchos discursos hace metáforas futboleras, detalla A24.
Durante la jornada del martes, Alberto Fernández recibió por la mañana en Olivos al presidente del Congreso Judío Americano, y luego suspendió el resto de la agenda. Lo propio hicieron la mayoría de los funcionarios.
Es habitual que en las finales de la copa del mundo la FIFA invite a los presidentes de las naciones involucradas a presenciar el partido en el estadio. Si bien no se sabe si la invitación se cursó formalmente, suele ser una tradición que así se haga. En la última final del mundo estuvieron presentes el presidente del país anfitrión (Rusia), Vladimir Putin; a continuación el presidente del país vencedor del Mundial, Emmanuel Macron y la presidenta de Croacia, Kolinda Grabar-Kitarovic.
Cómo vieron el mundial los funcionarios
El martes 13 de diciembre -día laborable normal- la Casa Rosada volvió a quedar desierta de funcionarios, que dejaron sus despachos vacíos para llegar a tiempo a ver al equipo comandado por el capital de la Selección Argentina, Lionel Messi, salir a la cancha para enfrentar a Croacia.
Desde el presidente Alberto Fernández, pasando por el jefe de Gabinete, Juan Manzur, y el ministro del Interior, Wado De Pedro, hasta el último funcionario político, dejaron sus despachos vacíos en la Casa Rosada para seguir el partido desde sus casas, con amigos o familiares.
Fernández directamente se quedó desde la mañana en la residencia presidencial de Olivos, junto a la primera dama Fabiola Yáñez y su pequeño hijo Francisco.
El presidente espera celebrar este miércoles, con un balance de los 3 años que lleva de gestión, este miércoles 14 a las 10 de la mañana en un acto en el patio Colón, detrás de la Casa Rosada.