La militancia de distintos sectores políticos y departamentales, se acercó en gran número al camping El Pinar, ubicado en Bermejo. Al aire libre y con mucho color, Anabel Fernández Sagasti entregó el mando partidario a Flor Destéfanis.
La intendenta de Santa Rosa asumió entre militantes de La Cámpora, el Movimiento Evita, gremios y desde distintos departamentos de la provincia. En las primeras filas hubo dirigentes de peso, como el ex vicegobernador Carlos Ciruca, el ex gobernador Celso Jaque, entre otros.
Salvo Fernando Ubieta (La Paz), ninguno de los intendentes peronistas se hizo presente. Martín Aveiro (Tunuyán), envió un video, y el resto se ausentaron por motivos variados. Aunque había representantes.
Destéfanis asume luego del fallo de Cristina Fernández a quien defendió con dureza. “Como abogada, entiendo que este proceso tiene muchas falencias, hay insuficiencia probatoria, no se respetaron las garantías constitucionales. Seguimos teniendo grandes demandas para con la democracia y la justicia tiene mucho que ver. Si esto sucede en la justicia, que queda para los ciudadanos de a pie. Necesitamos un debate de la justicia que queremos”, expresó.
Sobre el desafío que tiene por delante, la flamante presidenta partidaria, subrayó que trabajará para una fórmula competitiva que permita volver al Gobierno. “La idea es que haya unidad, que podamos tener una formula única competitiva. No veo a las Paso como algo problemático, tuvimos dos fórmulas y después acompañaron para consolidar las generales”, dijo.