En el marco del balotaje presidencial que se lleva a cabo hoy entre Sergio Massa y Javier Milei, los ciudadanos tienen varias opciones al emitir su voto, las cuales se clasifican en categorías de válidos y nulos, contemplando diversas situaciones.
El Código Nacional Electoral establece dos categorías principales: votos válidos y nulos. Los votos válidos incluyen las opciones “afirmativos” y “en blanco”. Se emiten votos afirmativos cuando se utiliza una boleta oficializada de una misma agrupación para todas las categorías o cuando se eligen boletas de fuerzas políticas diferentes para cada categoría. El voto en blanco se considera legítimo cuando el sobre está vacío o contiene un trozo de papel sin ninguna inscripción.
QUÉ ES EL VOTO NULO
El voto nulo se emite con una boleta no oficializada, con inscripciones, imágenes inadecuadas o la presencia de objetos extraños en el sobre. También se considera nulo si se incluyen boletas de distintas agrupaciones políticas para una misma categoría de cargos o si se emite mediante una boleta oficializada que contiene inscripciones o leyendas de cualquier tipo.
QUÉ ES EL VOTO RECURRIDO
El “voto recurrido”, en tanto, es aquel cuya nulidad y validez es cuestionada por algún fiscal presente en la mesa y, en ese caso, se deberá fundamentar en un formulario especial con “expresión concreta de la causa”.
QUÉ ES EL VOTO IMPUGNADO
Otra situación se presenta con el “voto de identidad impugnada”, donde la persona que vota no es la titular del documento que presenta. Esta impugnación solo puede ser formulada por el presidente de mesa o los fiscales.
CÓMO FUNCIONA EL BALOTAJE Y QUIÉN GANA
Este domingo participan las dos fórmulas a presidente y vicepresidente más votadas en la primera elección (la del 22 de octubre). Resultará electa aquella que obtenga la mayor cantidad de votos afirmativos válidamente emitidos (artículo 151 de la Ley 24.444).
En Argentina, la primera y única vez que se realizó un balotaje en una elección nacional fue en 2015, cuando Mauricio Macri de Cambiemos (51,34%) le ganó a Daniel Scioli de Frente para la Victoria (48,66%) por casi 700 mil votos.
Debería haberse producido un balotaje entre Héctor Cámpora (PJ) y Ricardo Balbín (UCR) en 1973, pero el radical renunció por el porcentaje alto alcanzado por el peronista.
En tanto, en 2003, pasó algo parecido: el peronista Carlos Menem declinó de la segunda vuelta. Se proclamó como presidente a Néstor Kirchner, peronista del FPV.