Comenzó el debate sobre la boleta única de papel en la Cámara de Diputados y uno de los ejes planteados por los especialistas es el del formato. ¿Puede llegar a tener el tamaño de un afiche? ¿Qué desafíos enfrenta el diseño? ¿Cómo podría adaptarse a un sistema con amplia oferta electoral?
Esos fueron algunos de los interrogantes que llevaron los expertos al plenario de comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto y Hacienda. El tratamiento de los proyectos continuará la semana que viene con nuevas exposiciones y luego será el turno del debate entre diputados.
Entre las desventajas de la boleta única se señaló el tamaño que podría llegar a tener por el volumen de la oferta electoral, sobre todo en las PASO, donde se dirimen las candidaturas. La cuestión se agrava en aquellos distritos que realizan las primarias el mismo día que las nacionales, como Buenos Aires.
“Traspolé la boleta única de Santa Fe a Buenos Aires. Me salió una boleta de 1,53 metros de largo y 53 centímetros de ancho”, comentó el diputado oficialista Leopoldo Moreau, en contra del cambio de sistema.
Pero algunos defensores de la boleta única también ven esto como una complejidad. Adrián Pérez, secretario de Asuntos Políticos durante la gestión de Mauricio Macri, reconoció que hay que “buscarle la vuelta” a la implementación cuando haya simultaneidad entre la elección nacional y la local.
“Algo hay que hacer, porque poner toda la oferta en una sola boleta es una cuestión bastante difícil. Votar la tira larga de presidente a intendente le da poco margen de maniobra al elector. La mejor opción es dividir una boleta única para cargos nacionales y otra para cargos provinciales”, consideró el exfuncionario.
Sin embargo, para varios de los especialistas que se expresaron en contra de la boleta única, el problema no tiene que ver con el diseño sino con el sistema de partidos. Según datos aportados en el debate, entre las elecciones de 2011 y 2019 el promedio total de partidos presentados fue de 561.
“Cuando aparecen en redes sociales esas boletas gigantes de casi dos metros, el problema no es del diseñador, el problema es que le estamos pidiendo al instrumento de votación que nos resuelva un problema que tenemos en el sistema de partidos, no en el sistema electoral. Tenemos un problema en los caños de agua y estamos proponiendo resolver la canilla”, ilustró el politólogo de la UBA Tomás Aguerre.
En el mismo sentido, Facundo Cruz (politólogo y docente de la UBA y UTDT) advirtió: “Los requisitos que establece la ley para crear partidos políticos son laxos. Si es fácil crear partidos políticos, vamos a tener que intentar que todos entren en la boleta única partidaria, y a eso hay que agregarle que Argentina tiene un sistema de primarias”.
“Le estamos pidiendo al sistema electoral cosas distintas y contrapuestas entre sí: que sea fácil que haya partidos políticos, que haya internas en los partidos, y que además todo esto entre en una misma boleta. Si estamos cambiando las partes de un motor, pensemos que una de ellas puede afectar las restantes”, graficó Cruz.
En cuanto al diseño, hay diferentes alternativas. El modelo cordobés está dividido en columnas, donde se ubican las categorías electivas; y en filas, que contienen las agrupaciones políticas. Mendoza, que utilizará boleta única por primera vez el año próximo, lo hará a la inversa. En el caso de Santa Fe hay una boleta por cada rubro.
“Viendo los diseños de las boletas que existen, dudo mucho que haya diseñadores involucrados, y si hay diseñadores involucrados, probablemente les están diciendo qué tienen que hacer”, dijo Andrés Snitcofsky, experto en diseño gráfico y visualización de datos, quien criticó algunos aspectos del modelo cordobés, como la utilización de fotografías de candidatos en la opción de “lista completa”.
El proyecto de ley de la Red de Acción Política (RAP), que es el que más adhesión tiene entre los bloques de la oposición, establece una única boleta para todas las categorías, que “estará dividida en espacios, franjas o columnas para cada agrupación política”. También prevé la opción de “lista completa”.
Además, se ordena incluir fotografías de los candidatos a presidente y vice, de los dos senadores nacionales, los dos primeros diputados nacionales y los dos primeros parlamentarios del Mercosur a nivel nacional. Ese esquema permitiría que las mujeres queden más visibles, ya que la mayoría de las listas son lideradas por hombres (en 2021 solo tres de cada diez mujeres encabezaron listas).