Los diputados mendocinos Alfredo Cornejo, de la UCR, y José Luis Ramón, de Equidad Federal para el Desarrollo, advirtieron hoy que la Argentina atraviesa una crisis en su sistema previsional y coincidieron que es un debate que adeuda la dirigencia política.
Ambos expresaron críticas hacia el Gobierno. El radical fue mucho más duro y anticipó su voto en contra a la modificación de la fórmula de movilidad jubilatoria. El segundo celebró que el Gobierno haya aceptado algunos cambios al proyecto y avisó que votará a favor.
En una sesión que se inició a las 12:34 de este martes, primero habló Ramón. Cuestionó a los “agoreros del mal” y destacó la posición del Gobierno, porque escuchó las propuestas y generó modificaciones a la iniciativa. Pero dijo que el país aún se debe una discusión de fondo sobre el sistema previsional.
Agregó que atar los haberes por inflación sería ponerle un techo a los ingresos de los jubilados, porque ese es un fenómeno que en algún momento se tiene que detener. En paralelo, reclamó que se discutan otras cuestiones importantes que tienen que ver con los egresos de los jubilados. “Tienen que andar agachados en los supermercados para ver si encuentran alguno de los precios cuidados”, dijo.
Ramón dijo que lo “satisface” que el tema se esté discutiendo en el Congreso, pero aclaró que no le satisface que lo están “haciendo a escondidas cuando se está produciendo un debate en el Senado sobre la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE)”.
“Para hablar de esta fórmula, hay que ser claros. Necesitamos darles claridad a nuestros hijos. Que cuando discutamos una fórmula no sea por una picardía de la política o una oportunidad que tengamos de que esto pase livianito. Y en el anterior gobierno pasaba lo mismo”, dijo Ramón.
Haberes que avergüenzan
Cornejo, diputado de Juntos por el Cambio y presidente de la UCR, dijo que es cierto que atañe a toda la dirigencia política argentina la crisis de todo el sistema previsional, que arrastra muchísimos años. “Pero cuando generalizamos, nadie se hace cargo de la responsabilidad. Si todos somos responsables de esta crisis, nadie es responsable de lo que pasa ni pasará”, dijo.
Según Cornejo, “cuando se habla de jubilaciones se habla de sensibilidad y no solo de la racionalidad económica. Se habla de gente que está en los últimos de su vida y que necesita ese ingreso para subsistir. Y la verdad es que el promedio de los haberes jubilatorios debe avergonzarnos y sensibilizarnos en lo más profundo de nuestro ser”.
Por eso, el ex gobernador de Mendoza consideró que es “una calamidad” estar con dirigentes políticos en el Poder Ejecutivo que “son cortoplacistas y que por ganar una elección son capaces, como Alberto Fernández, de prometerles 20% de aumento (a los jubilados) y luego prácticamente congelarles el haber jubilatorio”.
“(Fernández) no lo dijo una sola vez y al pasar, lo dijo varias veces en la campaña y no está cumpliendo con esa promesa. Les está achicando el poder adquisitivo a los más pobres, a lo peor de la pirámide previsional, y a muchos de ellos que aportaron religiosamente y sin ninguna moratoria treinta años de su vida para cobrar cualquier miseria”, se quejó el mendocino.
Cornejo dijo que la fórmula impulsada por el Poder Ejecutivo está atada a la macroeconómica y a reducir el déficit fiscal. “Pero ni siquiera son capaces de decir la verdad. Porque si explicaran que tenemos un problema de déficit fiscal y queremos congraciarnos con el Fondo Monetario Internacional para ganar credibilidad y así presentaran las cosas, pues el debate sería más honesto y profundo, y probablemente alcanzaríamos consensos porque la crisis previsional no se resuelve si no es con un acuerdo fuerte”, expresó.
Cornejo pidió al oficialismo que “repase” lo que va a hacer porque está condicionando no solo los haberes jubilatorios de la mayoría de la población sino otros ingresos que están atados a este régimen, como la Asignación Universal por Hijo, y “además está complicando la sostenibilidad fiscal del futuro, porque ajusta hoy en día a los jubilados pero resulta que nos perjudica en el mediano y largo plazo para tener un plan económico sostenible en el tiempo para crecer diez o veinte años para sacar a la gente de la pobreza”.
