En el congreso ordinario de la UCR, que a priori iba a ocurrir sin grandes novedades, pasaron cosas. El sector del ministro de Defensa, Luis Petri, llegó al comité de calle Alem con una propuesta que no fue aceptada, tal como venía, por la conducción partidaria.
Las versiones difieren en algunos detalles pero coinciden en algo: la intención del petrismo era la vicepresidencia del congreso ordinario que durará dos años. De alguna manera, se buscaba replicar lo que ocurrió con las autoridades provinciales. Griselda Petri (hermana del funcionario nacional) secunda al cornejista Andrés Lombardi en el Comité Provincia.
Sin embargo, la idea era que ese lugar al que aspiraban los petristas, se lo quedara un intendente. Así fue como el capitalino Ulpiano Suárez propuso a Natacha Eisenchlas. La presidencia fue para Natalio Mema, ministro de Gobierno y del sector cornejista.
Hubo silencio por parte de Griselda Petri a la consulta de Los Andes. Aunque, según cuentan fuentes que siguieron de cerca lo que ocurrió el sábado a la mañana en la sede de calle Alem, la discusión por la vicepresidencia empantanó todo arreglo posible. Hasta incluso, están quienes percibieron la intención de ruptura. “Por la actitud que tuvieron, no querían acordar”, dijeron testigos del chispazo.
Además de presidente y vice, hay cinco cargos para secretarios y no había impedimento para que un nombre cercano a Luis Petri se sentara en esa mesa. Al complicarse la deliberación, el resto de los cargos cayeron en una discusión sinuosa.
Entre las atribuciones, el Congreso es el que aprueba la Plataforma Electoral y el Plan de Acción Política, juzga la gestión de las autoridades partidarias y de los representantes del partido en cargos electivos, aplica las sanciones que juzgue necesarias a las autoridades partidarias y a los representantes del partido en cargos electivos, previa intervención de un tribunal de conducta. Y también es el que otorga el derecho de defensa pertinente, además de resolver, en última instancia, las apelaciones deducidas contra las decisiones del Tribunal de Conducta.
Portazo y muchas dudas
El grupo de más de 50 petristas, con Griselda Petri a la cabeza, que llegó al Congreso Ordinario venía con un borrador con sus aspiraciones como minoría representativa y por haber obtenido el 40% de los votos en la interna de Cambia Mendoza el año pasado.
El debate con los puntos de la orden del día arrancó pasadas las 11 de la mañana. A esa altura, el enojo los llevó a no participar del Congreso y hasta no querer aceptar lugares en los órganos de control, indicaron algunas fuentes partidarias. En la conformación de la Junta Electoral (5 titulares y 5 suplentes), el Tribunal de Conducta (3 titulares y 3 suplentes), la Comisión Revisora de Cuentas (3 titulares y 3 suplentes) y la Comisión Política, esperaban más lugares.
Hay dos órganos que resultan a atractivos para cualquier partido. Uno es la junta electoral partidaria. En el PJ, por ejemplo, hubo este año una fuerte puja por las sillas del organismo que avala las listas de candidatos.
De los cinco lugares en disputa, los seguidores de Petri esperaban contar con dos, pero debieron conformarse con uno solo. El nombre propuesto es el de la senadora María Galiñares quien habría pedido quedarse en la lista definitiva. Galiñares también hizo silencio ante la consulta de este medio.
Otro órgano atractivo es la comisión política que es la que definirá las alianzas que aprobó el Congreso. En esa mesa se sentarán el gobernador Alfredo Cornejo, presidente y vice del partido, Andrés Lombardi y Griselda Petri; además del presidente del Congreso, Natalio Mema y la vicepresidenta, Natacha Eisenchlas. El petrismo habría pedido otro lugar allí y quedarse con dos. “Siempre se ha conformado de la misma manera. Siempre”, sugirió un radical.
Ante la intención de no aceptar cargos, el petrismo decidió no participar del Congreso ni de las fotos. Al margen de todo esto, la duda que sobrevoló el sábado a la mañana es qué buscaba realmente el sector de Luis Petri en el Congreso Ordinario.
“Pidieron y se les dio participación”, aseveró una importante fuente radical. Lo mismo confirmó el presidente del Congreso Ordinario, Natalio Mema: “Al grupo de Luis Petri se le respetaron los lugares y forma parte de las autoridades del Congreso”. Y pasó a enumerar: “Su grupo conforma: un representante en la mesa del Congreso (son 5 miembros), un miembro en la Junta Electoral (son 5 miembros), un miembro en la Comisión Revisora de Cuentas ( son 3 miembros) y un miembro en el Tribunal de Ética (son 3 miembros).
Por otra parte, destacó que “forman parte de la mesa de Acción Política, que es la encargada de definir las alianzas electorales el próximo año”.
El ministro de Defensa no estaba en el comité y no habló con el gobernador Cornejo sobre el tema. Esto, alimenta aun más algunas sensaciones rupturistas del petrismo. En el terreno de las especulaciones, hay quienes no descartan una estrategia de Petri para no pegarse del todo al radicalismo y seguir cerca de Javier Milei.