El Tribunal de Cuentas de la provincia publicó los informes correspondientes al primer trimestre de este año, de acuerdo a las funciones asignadas en la Ley de Responsabilidad Fiscal. En la comparativa con los últimos tres meses del año pasado, hay algunos cambios en el detalle de la planta de personal y contratos de locación que declaran los municipios.
No se advierten notorios recortes, salvo en el caso de Las Heras. Celso Jaque anunció recorte, pero fue sutil. En Rivadavia, Ricardo Mansur se quejó de la herencia de Miguel Ronco, pero no bajó la nómina sino que subió. En Tunuyán, Emir Andraos registra más empleados de planta que al cierre del 2023. Estos últimos dos municipios cuestionan los datos publicados.
La caída de la recaudación y el impacto en el reparto de la coparticipación impactó en los municipios. Sin embargo, no se observan bajas notables en las erogaciones hacia el pago de personal, tanto de planta permanente (PP), como planta transitoria (PT) y contratos de locación.
El 10 de diciembre asumieron casi todos los intendentes electos que desembarcaban en la gestión municipal. Hay algunas transiciones que tuvieron pirotecnia política. El primer trimestre de este año ya muestra la mano de la gestión entrante y se advierte que no hay grandes cambios.
La excepción a lo que sucedió en la mayoría de los municipios está en Las Heras. Allí, Francisco Lo Presti encendió la motosierra sobre la plantilla que dejó Daniel Orozco y de los 3.682 empleados (2026 permanentes y 1656 transitorios) quedó en 2.637. Es decir que la disminución fue de 1.045 cargos.
La baja más significativa (más de la mitad) está en los empleados temporarios: quedan en 718 y en 1.919 los permanentes. En los contratos hubo disminución: de los 321 a diciembre del año pasado pasaron a 128 a marzo del corriente.
Poda light
Asumido Alejandro Molero en General Alvear, cerró el año con 931 personas (871 permanentes y 60 transitorias) además de 286 contratos. En lo que informó sobre el corte del primer trimestre, bochó las transitorias y dejó 843 permanentes (28 menos). Crecieron los contratos de locación de servicios: de 286 a 299.
En Guaymallén, Marcos Calvente cerró el año con 3.416 (2.709 PP y 707 PT) y quedó a fines de marzo del año actual, con 3.243 (2.697 PP y 546 PT). Es decir, 173 empleados menos siendo en su mayoría, de la planta transitoria. No obstante, aumentó los contratos: de 163 a 281.
Diego Costarelli redujo apenas la nómina con la que terminó el año en Godoy Cruz: de 1.299 empleados entre permanentes y transitorios, se computaron 9 menos al 31 de marzo. La baja más evidente se da en los contratos, paso de 502 a 443.
Esteban Allasino representa la continuidad del Pro dentro de La Unión Mendocina en Luján de Cuyo aunque también metió mano a la herencia: hay 54 empleados menos teniendo una nómina de 1522 personas y dio de baja unos 20 contratos.
Matías Stevanato continúa al frente del municipio de Maipú que ya venía administrando. En los últimos dos trimestres del año bajó la cantidad de empleados (permanentes y transitorios). Sin embargo, podó aun más este año: 1253 empleados permanentes (36 menos que el trimestre anterior) y 782 (15 menos). Los contratos bajaron casi la mitad y al 31 de marzo declararon 242.
En la Ciudad de Mendoza, Ulpiano Suárez también arrancó un nuevo mandato con baja en el personal. Tenía cerca de 2.280 empleados (la mayoría transitorios) al final del año pasado. Y en el primer trimestre registra 2.184, siendo 767 permanentes y 1417 transitorios. También bajó contratos.
San Martín registra diez legajos menos, entre bajas permanentes y altas transitorias que tiene la nómina de Raúl Rufeil, encarando su segundo mandato. Tienen 1.613 y cerca de 150 contratos, sin variaciones con respecto a diciembre del año pasado.
Omar Félix asumió en San Rafael para suceder a su hermano Emir y hubo recorte. La planta pasó de 2.510 a 2.386 y se notó mucho la poda en contratos: 331 a 86.
En San Carlos, Alejandro Morillas mantiene el mismo número porque las pocas bajas en la planta permanente se compensaron con altas en la transitoria dejando una nómina de 971 empleados. Subió en 30 contratos.
Los que subieron
Edgardo González en Lavalle registra un sutil aumento en lo que respecta a personal, bajó la permanente pero subió la temporal teniendo un aumento de 14 liquidaciones más que conforman una cuadrilla de 691 personas. En el detalle de los contratos, multiplicó por siete: 53 al terminar el año y 392 al primer trimestre del 2024.
Algo similar sucede en Junín. Mario Abed bajó en un puñado de personas la nómina: 8 plantas permanentes, quedando en 307, pero subió transitorias de 243 a 259. El balance da 656 personas (8 más que al cierre del 2024) y bajó los contratos: de 184 a 161.
En Santa Rosa, Flor Destéfanis pasó de 1.244 empleados a 1.265, pero además subió la cantidad de contratos en160, finalizando el primer trimestre con 461. Por La Paz, Fernando Ubieta registra un leve aumento, pasando de 694 legajos a 737 y redujo apenas los contratos, quedando en 491 (más de la mitad de la nómina).
Gustavo Aguilera, en Tupungato, también aumentó sutilmente la cantidad de empleados en once cargos permanentes: de 401 a 412 y una pequeña merma en los contratos, quedando en aproximadamente 260 (más de la mitad de los empleados de planta).
Tunuyán desmiente los datos que evidencian aumento de personal, notorio, desde que se fue Martín Aveiro y llegó Emir Andraos. Al final del 2023, registró 2328 empleados (1832 permanentes y 496 transitorios) además de cerca de 600 contratados.
Lo cierto es que al 31 de marzo de este año, las planillas marcan que la planta permanente subió a 2.160 personas (más de 300 personas) y los transitorios bajaron a 418, al igual que los contratos que se informaron 556.
“Hay errores, datos duplicados y vamos a reclamar. Tenemos menos empleados de planta, entre diciembre y marzo. Actualmente hay 1.139 entre permanentes y temporarios, además de cerca de 300 contratados”, indicó el jefe comunal.
Mucho ruido y ¿pocas nueces?
Un caso curioso se da en Malargüe. Celso Jaque despedazó a su antecesor Juan Manuel Ojeda y avisó que iba a darle de baja a 200 contratos de docentes con incompatibilidad de funciones. Además, luego de enviar el presupuesto municipal, remarcó que no se había incrementado la planta de personal sino todo lo contrario y de manera significativa, al 31 de diciembre de 2023.
Las planillas del Tribunal de Cuentas no condicen con los dichos del jefe comunal. Ojeda, al 30 de setiembre, informó una planta de 1860 personas (1.395 permanentes y 465 transitorios) además de 380 contratos y 2.323 horas cátedra.
Con Jaque en el sillón municipal, el cierre del año se dio con 1.378 permanentes (17 cargos menos) y una suba de 34 pantas transitorias, llegando a 499. Bajó 5 contratos y aumentó apenas las horas cátedra a 2.337. Tres meses después, ya en el año corriente, la planta se mantiene y aumentó un puñado la nómina transitoria quedando en 515.
Lo más notorio son 95 contratos menos y sólo 391 horas cátedra (seis veces menos). ¿Esa baja corresponde a los docentes con incompatibilidades? El municipio hizo silencio ante la consulta de Los Andes.
Ricardo Mansur también despotricó contra Miguel Ronco en Rivadavia. Fue recordada esa revisión de personal porque un empleado, indignado, le propinó un golpe al intendente. Hay diferencias entre lo que se publica en el Tribunal de Cuentas y lo que dice el municipio.
El jefe comunal cerró el año casi sin cambios en la nómina total: 781 empleados además de 325 contratos. Tres meses después, el informe trimestral dice que hay 378 personas en planta permanente (35 más) y 444 transitorias (6 más), es decir 822. Los contratos bajaron a 288.
Ante la consulta de Los Andes, la comuna indicó que “el dato que se sube a la página del tribunal es a raíz de lo que termina lanzando el sistema de INFOGOV, en base a las liquidaciones que se hacen”.
“Desde hace varios años que se viene informando de manera incorrecta por varias razones”, se quejaron desde el municipio y enumeran que no se cargaban las horas cátedras, o aparecían duplicados los empleados que tienen una categoría eventual y una contratada superior.
Ante esta situación en la que “no se logra con el Tribunal cambiar la manera en la que se informa, todos los meses se aclara que lo que se sube son liquidaciones y no cantidad real de empleados. Por eso, para ser transparentes con la cantidad de personal que tenemos, hacemos el registro por nuestra página web para quien lo necesite ver”.
De acuerdo a los datos que muestran, aseguran que al 1 de diciembre del año pasado (gestión Ronco) había 1.161 empleados activos incluidos 37 funcionarios y contemplando los contratos de locación de servicios. A mayo de este año, hay 1.113 que incluye 25 funcionarios.
El Tribunal de Cuentas contradijo estas versiones: “El Acuerdo 3949 es el que reglamenta la rendición de responsabilidad fiscal al Tribunal de Cuentas. En el mismo se establecen en formatos de Anexo la información a rendir. La misma debe surgir de los registros contables llevados por el organismo”.
Envían un modelo de planilla, que es idéntica a la que aparece en los informes y de esa forma se despegan de INFOGOV. “Se debe informar planta de personal en números de cargos y en importe, debiendo surgir estos datos de los registros contables, como se indica al final del anexo. Es como una declaración jurada”, agregaron desde el órgano de control.
Según se observa, los intendentes recortan gastos pero la familia municipal se mantiene salvo contadas excepciones. Las transiciones ofrecieron declaraciones mediáticas rimbombantes pero pocos cambios reales. Si la crisis se agudiza, habrá que ver si termina impactando en la nómina de personal.