Todo quedó listo para que el Senado sancione este jueves, con amplio apoyo, el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Juntos por el Cambio puso punto final al misterio y confirmó que aportará los votos necesarios para habilitar el tratamiento del proyecto.
En una reunión en las oficinas del bloque radical, en el segundo piso del Congreso, la bancada decidió aportar los dos tercios de los votos necesarios para avanzar con el debate sobre tablas, ya que el dictamen se firmó este martes y no cuenta con los siete días de vigencia reglamentarios.
Según voceros del encuentro, hubo “total armonía” en la decisión tomada. La posibilidad de condicionar el apoyo a la posible suba de retenciones al agro, como propuso en soledad la titular del PRO, Patricia Bullrich, ni siquiera fue abordada por el interbloque.
“Es un tema que no tiene nada que ver. Si el Ejecutivo quiere subir las retenciones, lo va a hacer. ¿Qué ganamos con postergar el tratamiento?”, dijo a este medio uno de los participantes, enojado con la actitud de Bullrich. “Se pegó un tiro en el pie”, graficó.
El presidente de la bancada, Alfredo Cornejo, aclaró ante su tropa que en caso de que el Poder Ejecutivo avance con una resolución o envíe un proyecto de ley, la oposición está en condiciones de frenar o voltear en el Congreso cualquier medida de ese tipo.
Además, el mendocino sostuvo que la facultad de fijar retenciones le corresponde al Congreso porque, al haberse rechazado el Presupuesto el año pasado, quedó sin efecto el artículo que prorrogaba esa potestad en manos del Poder Ejecutivo.
Todos los senadores avalaron esa postura y se mantienen en estado de alerta ante un eventual anuncio del Gobierno, pero de cara a la sesión prefirieron no mezclar los tantos y priorizaron la necesidad de facilitar la sanción del acuerdo con el FMI para no empujar al país al default.
En la alianza opositora no hubo margen para diferenciarse de la postura adoptada en Diputados, donde aportaron más de la mitad de los votos positivos (111 de 202). Ese resultado le sirvió a Juntos por el Cambio para abonar su discurso de “responsabilidad institucional”.
“Algunos nos quieren empujar al ‘cuanto peor, mejor’, pero por más aguerridos que seamos y después de todo el esfuerzo que se hizo en Diputados, no podemos ir al default”, razonó un miembro del interbloque, que le pidió a Cornejo no abrir la discusión sobre la amenaza de Bullrich.
El titular del bloque PRO, Humberto Schiavoni, sumó otro argumento durante la reunión, al recordar que el encargado de negociar la letra final del proyecto en nombre de la coalición fue el diputado macrista Luciano Laspina.
Asimismo, Cornejo reforzó la idea de que solo se votará la autorización al Ejecutivo para concretar la operación de crédito y no el programa económico, algo que le compete al Gobierno. Esa modificación en el articulado fue un triunfo de la oposición en Diputados.
Del encuentro participaron, además de Cornejo y Schiavoni, el titular del bloque radical, Luis Naidenoff, y los senadores Martín Lousteau, Alfredo De Angeli, Luis Juez, Carolina Losada, Silvia Giacoppo, Roberto Basualdo, Stella Maris Olalla y Juan Carlos Romero.
También estuvieron Víctor Zimmermann, Guadalupe Tagliaferri, Pablo Blanco, Julio Martínez, Mario Fiad, Victoria Huala, Flavio Fama, Mercedes Valenzuela, Edith Terenzi y José Torello.
La incógnita del voto K
Con el aval de Juntos por el Cambio, el proyecto será aprobado por amplia mayoría, más allá de la posición de unos diez integrantes del Frente de Todos identificados con la vicepresidenta Cristina Kirchner que votarán en contra o se abstendrán.
Una primera señal de esa división se vio en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, donde las kirchneristas Juliana Di Tullio (Buenos Aires) y Ana María Ianni (Santa Cruz) firmaron el dictamen en disidencia, una forma de expresar su disconformidad sin obstruir el tratamiento.
El bloque oficialista, al mando de José Mayans, tendrá una última reunión este jueves a las 11, en la previa de la sesión. Después de los duros cruces de los primeros encuentros, en la bancada destacan que se logró reencauzar el diálogo y que se respetarán todas las posiciones.
Pero el kirchnerismo duro volvió a encender la interna en las últimas horas, en una reunión de legisladores con el economista y politólogo belga Eric Toussaint, presidente del Comité para la Abolición de las Deudas Ilegítimas, quien trabajó en la “Comisión de la Verdad” sobre la deuda en Grecia.
Toussaint fue recibido en el despacho del senador Oscar Parrilli junto a las diputadas Paula Penacca, Gabriela Estévez y Florencia Lampreabe, de La Cámpora; Itai Hagman, de Patria Grande; y los senadores María Inés Pilatti Vergara, Matías Rodríguez y Guillermo Snopek.
En el encuentro, el especialista sostuvo que “Argentina tiene la oportunidad de suspender los pagos y declarar la deuda odiosa”, y recordó la sanción de la ley que le puso un freno al accionar de los fondos buitre en Bélgica, en julio de 2015.
