El senador nacional Alfredo Cornejo descargó una rápida pero contundente crítica contra el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, quien, como el mendocino, integra Juntos por el Cambio.
Ocurrió anoche, durante la cena anual de la Fundación Libertad, que tuvo como principales protagonistas al ex presidente, Mauricio Macri; el Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa y el ex mandatario uruguayo, Julio María Sanguinetti.
Cornejo fue uno de los que dio un discurso en el evento. En uso de los cuatro minutos que le habían dado a cada disertante, aseguró que abreva en las ideas de la libertad e indicó que el futuro requiere una gestión pública práctica y pragmática.
Recordó en este sentido que durante sus gestiones como intendente de Godoy Cruz y gobernador de la provincia redujo las plantas de personal público (50% luego de dos periodos en el municipio y 10% tras su paso por la gobernación) y cargó contra “los populismos de derecha e izquierda”.
“Se habla mucho, pero experiencias exitosas de libertad no hay muchas en los últimos tiempos”, aseguró en una frase dirigida tanto al kirchnerismo como al libertario Javier Milei.
También se dio un tiempo para referirse a la gesta libertadora desde Cuyo del general José de San Martín, pero rápidamente recaló en el presente. Y ahí no dudó en golpear a Rodríguez Larreta, quien había dado un discurso antes que él.
Habló Cornejo de “la cuarentena estúpida que tuvimos, administrada por el gobierno nacional, que enredó a buena parte de los gobiernos provinciales y municipales” y, en contraste, destacó a Mendoza, que “con el gobernador (Rodolfo) Suárez -presente en la cena- se desmarcó”.
El líder radical destacó que Suárez, en medio de la cuarentena del coronavirus cerró las actividades “sólo un trimestre, mientras CABA no abrió hasta fin de año y se notó presionado por el gobierno nacional”.
Tras la lapidaria frase, volvió a referirse Cornejo a la “libertad práctica” y pidió “unidad de la coalición de oposición y alternancia”.
Larreta, por su parte, dio antes un discurso “antigrieta”, aunque sostuvo que nunca abandonó sus convicciones. Por ejemplo con “la convicción de tener las escuelas abiertas, cuando el país las cerraba producto del gobierno”, expresó en un tramo, sin hacer la salvedad de que Mendoza también adoptó esa medida.
