Alfredo Cornejo oficializó que será el candidato a gobernador del radicalismo en las elecciones PASO del 11 de junio, pero se ocupó de dejar en claro que durante bastante tiempo no dirá quién será su compañero o compañera de fórmula.
El cornejismo recalcó que la búsqueda del vice será infructuosa, porque “hasta el final” no se conocerá el nombre. “Final”, en términos de plazos, podría significar que la revelación se producirá recién cerca del 22 de abril, fecha en la que el cronograma electoral ordena presentar las listas para las primarias provinciales.
Esto significa que Cornejo concentrará todo el liderazgo en el camino hacia las definiciones del resto de las candidaturas y en las primeras campañas electorales, que serán las que se desarrollarán en los municipios que desdoblaron los comicios.
Acostumbrado a marcar los tiempos, el flamante candidato a gobernador se ha encargado de avisarle a la prensa que cualquier teoría anticipada sobre su compañero/a de fórmula carecerá de “credibilidad” alguna. Aunque desde antes de que se formalizara su candidatura a gobernador, la danza de nombres en torno al número dos de la fórmula arrancó, impulsada por el propio radicalismo.
Las usinas de la UCR pusieron en carrera a varias mujeres, desde la presidenta provisional del Senado provincial, Natacha Eisenchlas, hasta la senadora nacional Mariana Juri, pasando incluso por la ministra de Salud Ana María Nadal, la “técnica” que se aseguró de estar en el lanzamiento de Cornejo el miércoles en una especie de debut respecto de las roscas partidarias.
Pero en el medio, nació la teoría de que el intendente de Las Heras, Daniel Orozco, podría ser tenido en cuenta para integrar el binomio.
No hay por ahora muchas más razones para alentar esta posibilidad que el hecho de que Orozco bajó su propia candidatura a gobernador para avalar la de Cornejo. Y las declaraciones posteriores del médico, quien ha dicho que aceptaría con gusto esa postulación.
Orozco pareciera esperar, con cierta ansiedad, una retribución de Cornejo por el gesto de haber dado el paso al costado. Pero cerca de Cornejo, dicen que es poco probable que eso ocurra en el corto plazo. Además, el candidato a gobernador y buena parte del radicalismo mendocino están atentos a algo más que el destino del intendente actual: hay mucha intriga respecto de quién será el heredero de Orozco en su departamento.
El trauma de la sucesión
Desde hace meses, Las Heras vive un verdadero trauma por la sucesión del intendente. El médico no puede ir por otro periodo y viene tensando la cuerda para tener autonomía en la decisión. La candidata principal del conductor de Las Heras es su secretaria de gobierno en la comuna y pareja, Janina Ortíz.
Pero la nominación de Ortíz ha generado sorpresa y resistencias en la cúpula del radicalismo mendocino, que ha robustecido a otros nombres para la intendencia. Fabián Tello, secretario general de la Intendencia, es el que mejor se posiciona por el lado del aparato partidario para confrontar con Ortíz, en la lista más acotada de candidatos, que incluye sólo a quienes están adentro del municipio.
Sin embargo, la lista no se termina ahí. Cornejo viene hace tiempo dando gestos de que tiene su propia apuesta: Andrés “Peti” Lombardi, el presidente de la Cámara de Diputados. El cornejismo cree que su líder podría buscar un “arreglo” de la interna en Las Heras colocándolo encima de quienes protagonizan la puja.
La lista es más extensa todavía y, como en el caso del vicegobernador de Cornejo, tampoco asoma una definición inminente. Tampoco hay una estabilidad en las conversaciones que pudieran tener Orozco y Cornejo al respecto: el intendente llenó de elogios al candidato el martes, pero el miércoles pegó el faltazo en el propio anuncio formal de su postulación.
Culebrón
Es uno de los grandes culebrones electorales la sucesión radical en Las Heras. A nadie le cabe duda que Orozco peleará hasta el final para que la candidata sea la mujer que lo acompaña desde que era secretaria suya en el consultorio médico, y que con el correr de los años, particularmente en la segunda gestión del intendente, se convirtió en una de las funcionarias más importantes de su gabinete.
Ortíz ingresó al municipio recién en 2018 como empleada administrativa de otro posible candidato, el secretario Francisco Lo Presti, pero en poco tiempo se convirtió en funcionaria del área de Participación Ciudadana. En el inicio del segundo periodo de Orozco, dio el gran salto a la secretaría de Gobierno.
La apuesta de Orozco por ella fue reforzando su perfil de “díscolo” radical. El intendente, ciertamente, nunca ha sido predecible para el gobernador Rodolfo Suárez. Se lanzó como candidato a gobernador cuando Suárez le pedía a todos los dirigentes radicales que nadie lo hiciera. Y a fines de enero, sorpresivamente se diferenció del gobernador, cuando sostuvo que él sí hubiera recibido al presidente Alberto Fernández en su última visita a Mendoza.
Orozco ha conseguido desconcertar incluso hasta quien fuera su mentor político: Julio Cobos. El diputado nacional tomó distancia del intendente de Las Heras y cuestiona algunas conductas suyas, como aquellas expresiones en las que se diferenció de Suárez. Hay quienes dicen incluso que el intendente de Las Heras le había dado apoyo al gobernador para que eludiera al Presidente y después dijo lo contrario.
Una señal de las diferencias con Orozco puede haber sido que Cobos prefiere que una mujer sea la candidata a la vicegobernación.
En cualquier caso, Orozco recuperó Las Heras para la UCR tras años de control peronista y sobre el final de sus dos mandatos como intendente pretende hacer pesar ese logro histórico. Por eso se posicionó para una fórmula gubernamental que no parece probable, por ser Cornejo y él, en cuanto a estilos de ejercicio político, casi como el agua y el aceite. Pero hasta lo más improbable, a veces, puede hacerse realidad en política.