El Gobierno provincial decidió echar a una inspectora de la Dirección de Fiscalización y Control que intentó coimear a empleados de un supermercado. Según marca el decreto del Boletín Oficial, la mujer pedía artículos del mercado a cambio de no controlar y consiguientemente, no aplicar multas.
Fue a través de una nota presentada y suscripta por el encargado de un supermercado de Carrodilla, el que sostuvo que el 9 de septiembre del 2016 se presentaron inspectores de la Dirección de Fiscalización y Control, entre ellos Elena Fabiana Yunes, quienes avanzaron en la búsqueda de la coima.
Según el relato de los denunciantes, estas personas “se identificaron con sus respectivas credenciales y manifestaron que ‘si buscan algo mal seguro lo encuentran, aunque sea en algún producto, y que si nosotros le dábamos algo para evitar multas ellos harían las actas diciendo que estaba todo en orden y no nos harían las multas, las cuales son muy elevadas depende del motivo, por lo que piden mercadería por el valor de $ 1.000 cada uno. Los inspectores toman carros, hacen como que controlan la mercadería, pero en realidad están comprando cosas para ellos, luego hacen las respectivas Actas donde dicen que se encuentra todo en condiciones’”, marcaron en su relato de los hechos.
Pero también destacaron que el mismo modus operandi ocurrió en la localidad de Eugenio Bustos, en San Carlos.
A partir de ahí, respectivas denuncias ante la Unidad Fiscal Maipú-Luján y la Unidad Fiscal Tunuyán, pero también presentaron. Pero también se abrió una investigación por parte del Poder Ejecutivo, a raíz de otra denuncia formulada por María Teresa Badui, ex Directora de Control de Gestión del ex Ministerio de Economía.
Según declaraciones de testigos, así como también registros de videos, en el decreto se marcó que “claramente se observa a la agente Yunes, conjuntamente con otras dos personas, pasando productos por la caja, los cuales son embolsados por el cajero, dejando inclusive mercadería en el carro, para posteriormente retirar las bolsas de la caja por una tercera persona”.
“La conducta bajo análisis resulta pasible de la sanción de cesantía y que la misma tendrá carácter de provisional y podrá ser sustituida por otra de mayor gravedad luego de dictada la eventual sentencia definitiva en las causas penales existentes”.
Con toda esta información, se decidió “la sanción de cesantía sujeta a exoneración, a las resultas de sentencia judicial firme en el fuero penal, por los motivos expuestos en los considerandos de este decreto, a la agente Elena Fabiana Yunes”.
