El Fondo Monetario Internacional (FMI) le puso un asterisco al proyecto de dolarización que impulsa el candidato a presidente por La Libertad Avanza (LLA), Javier Milei, quien cruzó a quienes pusieron en duda su plan y aseguró que la conversión sería “al tipo de cambio de mercado”, que a la fecha correspondería a $ 730.
El Director para del Hemisferio Occidental del FMI, el chileno Rodrigo Valdés, aseguró que la dolarización “no sustituye una política fiscal sostenible” y pidió “no adelantarse a la discusión”.
“Dolarizar es una pregunta que los mercados hoy día se hacen más que por el tamaño, por las condiciones iniciales de cantidad de reservas que tiene la Argentina. Milei tocó este tema y ellos tienen un plan que están trabajando todavía y yo no me adelantaría en la discusión”, indicó Valdés en una entrevista publicada por el diario español.
Por su parte, Milei salió a despejar dudas y utilizó su invitación al 9° Latam Economic Forum que se realizó en Buenos Aires para dejar en claro que su propuesta sigue en pie tras algunas conjeturas sobre una “marcha atrás” por las dificultades para ponerla en práctica.
Si bien los interrogantes surgieron de explicaciones que intentaron dar referentes económicos de su entorno, Milei le adjudicó la polémica a “economistas de Juntos por el Cambio que no saben hacer cuentas”, “profesionales que trabajan a favor de los políticos” y a “periodistas ensobrados”.
Sin embargo, fueron sus espadas Dario Epstein –quien lo presentó en el foro como “el futuro presidente de los argentinos”- y la candidata a diputada Diana Mondino, quienes con sus dichos habilitaron diferentes especulaciones.
Minutos antes de su presentación, Mondino había señalado que un eventual gobierno de La Libertad Avanza levantará el cepo “lo antes que se pueda” pero advirtió que no hay certeza de cuándo porque no se conoce es la situación financiera del Estado Argentino.
“Cuando empezamos el análisis con Javier se necesitan U$S 9.200 millones. Ahora hay que sumar Leliqs por unos U$S 35.000 millones, entre por U$S 35.000/36.000 o 38.000 millones por importaciones, nadie sabe cuánto es la deuda por SIRA, más los depósitos, todo eso suma cerca de U$S 90.000 millones”, explicó la economista.
A los pocos minutos Milei se plantó en el atril y fue enfático: “En el día de hoy voy a estar hablando de lo que popularmente se discute como dolarización pese a que hace siete años que hablo de competencia de monedas. Parte de este trabajo es lidiar con los mienten que de manera directa o deformando lo que uno dice, o intentan formar opinión con datos falsos”.
En ese marco, el candidato a presidente reiteró sus diatribas contra los políticos y su promesa de cerrar el Banco Central, al tiempo que explicó una de las formas en que se puede llevar adelante la dolarización utilizando la idea que maneja el economista Emilio Ocampo.
Milei explicó que el pasivo del Banco Central se compone de la base monetaria y las Leliqs que en conjunto suman unos U$S 40.000 millones. A su vez, indicó que el BCRA tiene reservas por unos U$S 10.000 millones que se utilizarían para rescatar la base monetaria y que las Leliqs se sustituirían a partir de la venta de títulos públicos actualmente en poder del BCRA cuya valuación nominal es de U$S 120.000 millones, pero que a precios de mercado son U$S 30.000 millones.
El candidato presidencial sostuvo que “esta es una de las formas en las que se puede hacer, pero hay por lo menos otras cinco posibles”.
De esta manera, el líder de los libertarios buscó despejar las dudas sobre la iniciativa.
Acerca de los tiempos para su concreción, señaló que se inclina por cómo lo realizó El Salvador, que implica un cambio paulatino y voluntario de pesos por dólares hasta completar dos tercios de la base monetaria y en ese momento se convierte en una dolarización de hecho.
Sobre el tipo de cambio al que se realizaría esa conversión, Milei no dejó dudas: “Al tipo de cambio de mercado, el del Contado con Liquidación, que ahora es de $ 730″.
Esta definición de Milei fue cerca del mediodía, pero al final de la rueda el CCL descendió a la zona de $ 720.
El esquema propuesto por Milei tiene incorporado un eje central que es un presupuesto equilibrado sin déficit fiscal, dado que el Estado perderá la capacidad de emitir moneda para cubrirlo.