Después la adquisición de 24 aviones F-16 para la Fuerza Aérea Argentina (FAA), el gobierno de Javier Milei está considerando la posibilidad de incorporar más armamento militar para el Ejército y la Armada Argentina, que requieren actualizar y mejorar su equipamiento.
Según fuentes oficiales consultadas por TN, el Ministerio de Defensa, bajo la dirección de Luis Petri está evaluando ofertas de material bélico para incorporar blindados 8x8 para el Ejército y está analizando opciones de mercado para renovar la flota naval de la Armada. Sin embargo, la cuestión presupuestaria se presenta como un desafío difícil de superar.
El proyecto más prometedor parece ser la incorporación de blindados 8x8 para el Ejército. Se está considerando el M116 Stricker, de origen norteamericano/canadiense, y ya se obtuvo el visto bueno de Estados Unidos para su adquisición. Además, se está discutiendo la posibilidad de comprar un lote de estos vehículos que actualmente están en servicio en Nueva Zelanda.
Aunque los números de la posible compra no trascendieron, se habla de la adquisición de 100 vehículos blindados: “Hay una firme decisión de avanzar, pero todavía falta”, aclararon.
Al medio mencionado le explicaron las fuentes: “Hace tiempo que el proyecto de vehículos brindados a rueda está en carpeta, de hecho hace dos o tres años se hicieron pruebas en el país del vehículo Guaraní 6x6, un proyecto que luego se frustró, pero la idea está. No es un tanque de guerra, es un vehículo que tiene distintas versiones, con un armamento menor, pero con la posibilidad de transportar grupos de personas en su interior”.
En cuanto a la Armada Argentina, se están evaluando diversas opciones para renovar su flota, aunque la compra de equipamiento naval es más costosa que en otras fuerzas. A pesar de las dificultades financieras, se está estudiando la posibilidad de adquirir submarinos de segunda mano para sostener el entrenamiento de los submarinistas, ya que el país no cuenta con submarinos activos desde la tragedia del ARA San Juan en 2017.
La reciente compra de los aviones F-16 fue oficializada el lunes a través del Boletín Oficial, con un costo de 300 millones de dólares, a los que se sumarán otros 300 millones de dólares en armamento. Este desembolso se realizará en cinco cuotas anuales, según lo estipulado en la decisión administrativa 252/2024.
Además, se destinarán entre 10 y 15 millones de dólares a las refacciones necesarias en la base aérea de Tandil, donde estarán ubicados los nuevos cazabombarderos. Estas refacciones incluirán la reconfiguración de espacios, repavimentación de pistas, ampliación de hangares y la instalación de nueva tecnología, como simuladores de vuelo.
ASPIRACIONES DE ARGENTINA EN EL ESCENARIO INTERNACIONAL
Desde la asunción de Milei, Argentina aspira a ser reconocida como “socio global” de la OTAN, una iniciativa presentada por el ministro Petri. La adquisición de nuevo material militar busca alinear al país con los estándares de las naciones miembros de la OTAN, mejorando su posición en comparación con vecinos como Chile y Brasil, cuyas fuerzas armadas están más avanzadas.