Como parte de otra de sus medidas para achicar el gasto público, el jefe de Estado, Javier Milei, traspasará a la Fuerza Aérea el manejo de la flota de aviones presidenciales. La misma consta de tres helicópteros y tres aeronaves, entre los cuales se encuentra el Boeing 757-256 (ARG 01) comprado por Alberto Fernández.
En diversas ocasiones, Milei manifestó que los funcionarios públicos deben viajar en aviones de línea, noción que reiteró una vez más durante su discurso en la apertura de las sesiones ordinarias en el Congreso Nacional. Incluso, en sus viajes a Israel, Italia, el Vaticano y Estados Unidos el Gobierno aseguró que los vuelos no fueron costeados con fondos públicos.
En este marco, este martes trascendió que la flota de aviones presidenciales será trasladada en los próximos días a la órbita del Ministerio de Defensa a cargo de Luis Petri. En rigor, será la Fuerza Aérea, organismo encabezado por el brigadier mayor Fernando Luis Mengo, quien se encargará del mantenimiento y la operación de las aeronaves aunque estas seguirán dependiendo de la secretaría general de la Presidencia, según supo La Nación.
Sin embargo, desde el Gobierno manifestaron que la intención es, eventualmente, vender la flota y con ese dinero adquirir “algo más chico y nuevo, que también va a seguir estando” bajo el control de dicha secretaría, informó el mencionado medio.
La flota presidencial consta de tres aviones entre los que se encuentran el Boeing 757 (ARG 01), un Boeing 737 (ARG 02) y un Leart 60 (ARG 03) -aunque este último ya estaba a cargo de la Fuerza Aérea-, y tres helicópteros: un Black Hawk S70 (ARG 10), un Sikorsky S 76 (ARG 11) y un Sikorsky S 76 (ARG 12).
La decisión tomada por Milei radica en que las aeronaves requerían de un costoso mantenimiento, lo cual no va en sintonía con los esfuerzos del Gobierno por reducir el gasto público.
En este sentido, informaron que el Boeing 757-256 (ARG 01) comprado por Alberto Fernández en 2022 por USD 21.730.000 -sumado a la venta del antiguo Tango 01 valuado en unos USD 3 millones- requiere de “gastos exorbitantes” para su conservación. El lujoso medio de transporte aéreo cuenta con actualizaciones tecnológicas, capacidad para 39 pasajeros, un dormitorio principal, y otras dos habitaciones que pueden ser utilizados para visitas que o como salas de reuniones,
La Fuerza Aérea también estará a cargo del control operacional de la flota, aunque el presidente también podrá hacer uso de las aeronaves de ser necesario.
