En el Gobierno nacional trabajan a toda marcha para cerrar un acuerdo con las grandes empresas, fundamentalmente del sector de los alimentos, que permita congelar el precio de al menos 1500 productos de consumo masivo por lo menos hasta febrero.
El ministro de Economía, Sergio Massa, bajó la orden de acelerar las gestiones para coronar el programa de Precios Justos. La apuesta oficial es lanzarlo en noviembre para reforzar el resto de las acciones tendientes a amortiguar el impacto de la inflación.
Según informaron fuentes oficiales a este medio, las tratativas que lidera el secretario de Comercio, Matías Tombolini, apuntan a crear una canasta, de entre 1.500 y 2.000 artículos, cuyos precios se mantengan sin modificación por 90 ó 120 días.
“La lista surgirá de las propuestas que hagan las empresas. Queremos lograr un acuerdo voluntario y por eso les pedimos a las empresas que ofrezcan los productos”, explicaron.
Massa trasladó un pedido especial para materializar los compromisos que se definan: el ministro quiere que los precios se impriman en las etiquetas de cada uno de los productos que figuren en el programa.
Esos son los parámetros con los que Tombolini emprendió las reuniones el lunes pasado. En los últimos días, el secretario ya se reunió con muchos de los representantes de las casi 30 empresas que concentran el 65% del consumo masivo.
En el Gobierno reconocen que los empresarios se muestran reticentes, pero apelan al acercamiento de posiciones e incluso diseñan una serie de incentivos.
Aunque trascendió que una posibilidad era constituir un esquema cambiario diferencial para beneficiar a aquellas empresas que exportan, al igual que se hizo con el “dólar soja”, en Comercio dijeron que no es un tema en análisis. Y aclararon que la propuesta la promovieron algunos de los ejecutivos convocados.
Por lo pronto, el pedido de Massa para que los precios figuren en las etiquetas supone contratiempos porque además del tiempo que demandarán los cambios en los diseños están los plazos de rotación de los artículos en las góndolas, que en algunos casos son superiores a los 70 días.
Para resolver ese escollo, Precios Justos podría contemplar distintas etapas de implementación. El ministro de Economía sigue de cerca las gestiones con las empresas y espera que Tombolini le entregue el próximo viernes un informe con los detalles de los avances y las dificultades a resolver.
Precios Justos apunta a descomprimir la escalada en los alimentos, uno de los segmentos de mayor incidencia en el promedio de la inflación que elabora el Indec. El último informe oficial indicó que esa división registró un avance de 6,7% en septiembre y que acumuló un incremento del 69,5% desde diciembre del año pasado.
En paralelo, el gobierno nacional avanza con otras medidas para amortiguar el impacto sobre el poder adquisitivo y el consumo. El miércoles, el presidente Alberto Fernández confirmó que el próximo viernes entrará en vigencia el plan “Ahora30″, que además de cuotas contempla el congelamiento en el precio de algunos electrodomésticos.
También el miércoles se publicó en el Boletín Oficial la Resolución 701/2022, del Ministerio de Economía, para involucrar a las “autoridades provinciales, al Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y a los municipios de todo el país” en los controles sobre el cumplimiento del Programa Precios Cuidados.
