El Instituto Nacional Central Único Coordinado de Ablación e Implante (Incucai) salió al cruce de las insólitas declaraciones que realizó el diputado Javier Milei sobre la posibilidad de instalar un mercado de venta de órganos en el país.
El diputado de La Libertad Avanza había afirmado livianamente que la venta de órganos se trataría de un “mercado más”. Ante esto el Incucai destacó que “el comercio de órganos se encuentra prohibido por la Ley de Trasplantes” y precisó que la donación “se basa en una decisión solidaria, altruista y desinteresada, por lo que no puede existir ninguna contraprestación económica a cambio”.
Además, indicaron que la posibilidad de la compra venta y de poner precio a un órgano o a una parte del cuerpo “transforma al ser humano de sujeto en objeto y vulnera los derechos humanos y la dignidad humana”.
De concretarse la propuesta de Milei “se vulneraría el principio de justicia como equidad, y consagraría las condiciones de inequidad” ya que el supuesto “vendedor” lo haría por necesidad y el “comprador” lo haría por sus posibilidades económicas, agregaron.
“El ejercicio de la autonomía se sustenta en la libertad para la toma de decisiones. En este sentido queda claro que la decisión de vender un órgano basado en las necesidades económicas implica coacción y no puede considerarse autónoma”, sostuvo el organismo.
Consultado por Radio Mitre sobre si estaba a favor de la venta de órganos, Milei respondió: “Es un mercado más. Vos podrías pensarlo como un mercado. El problema es por qué todo lo tiene que estar regulando el Estado”.
El dirigente libertario planteó entonces que “hay estudios en Estados Unidos que indican que, si dejaras esos mercados libres, funcionarían muchísimo mejor y tendrían menos problemas”.
Respuesta del Incucai a Milei
Por esto, desde el Incucai recordaron que “en nuestro país solo está permitida la donación de órganos en vida para los mayores de 18 años en caso de parientes consanguíneos o por adopción hasta el cuarto grado, cónyuges, o personas que mantengan una unión convivencial”.
Por lo que, “de esta forma, se garantiza que no exista comercio ni ningún tipo de contraprestación por la donación de órganos”, agregaron.
El Incucai detalló también que las políticas sanitarias, a través del sistema de donación y trasplante, “garantizan la equidad en el acceso al trasplante para toda persona que lo necesite, independientemente de su condición social o económica”
“La gratuidad es condición esencial para asegurar la transparencia del sistema y garantizar equidad con base en principios de justicia distributiva”, concluyó el Incucai.
El organismo condenó fuertemente la propuesta de Milei ya que “basadas en la supuesta defensa de la autonomía no vislumbran las potenciales y peligrosas consecuencias para la ciudadanía”.