A punto de entrar en el mes de junio, la vacunación contra el Covid en Mendoza y el país promete acelerarse. Y con las elecciones legislativas cada vez más cerca (las PASO serán en setiembre), es clave para el Gobierno nacional tener a la mayor cantidad de población inoculada, teniendo en cuenta que más vacunas significan mayor apertura, más movimiento económico y por ende, menos crisis. Así, como en el ’95 cuando el “voto cuota” la dio la reelección a Carlos Menem, en el oficialismo algunos ven ahora en el “voto vacuna” la chance de revalidar la gestión de Alberto Fernández y del kirchnerismo.
Y en Mendoza, será un factor clave también para el peronismo, que ve en las vacunas que mande la Nación un arma para pelearle en las urnas a Rodolfo Suárez y Cambia Mendoza.
Hay un sondeo de la consultora Poliarquía, realizado en la primera semana de mayo, que avala en parte esta hipótesis. Indica que entre aquellas personas que cuentan con todos sus parientes de riesgo vacunados, la adhesión a la política sanitaria que lleva adelante el Presidente es del 58%; mientras que en los que no tienen vacunados en su círculo cercano, esta adhesión se desploma a sólo el 17%.
Ahora bien, la incógnita es cómo podría influir en Mendoza un eventual incremento en la cantidad de vacunas, y si eso se traducirá en votos para el Frente de Todos, que tendrá seguramente a Anabel Fernández Sagasti como cabeza de listas.
Para los analistas consultados por Los Andes, el escenario todavía es volátil e impreciso, aunque destacaron que mejorar la performance en la compra de vacunas no necesariamente se traducirá en votos, ya que hay otros factores para calificar una gestión, como la economía, y un buen porcentaje de la población tiene una visión pesimista respecto a cómo evolucionará la situación del país.
En términos de vacunación, esta semana el Gobierno nacional distribuirá más de 2,5 millones en las 24 jurisdicciones. A Mendoza le tocarán 122.100, de las cuales 73.500 son AstraZeneca, 45.000 de la primera dosis de Sputnik V y 3.600 de la demandada segunda dosis de la vacuna rusa.
Esto representa, para Mendoza, un 20% del universo de todas las dosis que ha recibido desde hace 5 meses, teniendo en cuenta que hasta la fecha llegaron 603.500 vacunas, según el Monitor Público de Vacunación.
De ellas, la Provincia ha utilizado 490.634 dosis, por lo que aún tiene un 18% de vacunas sin aplicar a las personas que ya están inscriptas y a la espera de ser inoculadas.
Salud o economía
Entre los consultores entrevistados, tanto Marta Reale (Reale-Dalla Torre) como Lucas Romero (Synopsis) consideran que en Mendoza -y también a nivel nacional- la recuperación de la gestión de Fernández en términos sanitarios ha sido “sólo en parte”.
Si bien coinciden con Poliarquía en que aquellos sectores que ya fueron vacunados han tendido a mejorar su visión del Presidente, Reale y Romero marcan que ocurre “principalmente a los que pertenecen a la base del Frente de Todos”, pero no aplica al resto del universo de los vacunados.
“Los que han mejorado su vínculo con Fernández son mayores de 60 que lo votaron y estaban desencantados por su gestión sanitaria”, marcó Romero, según la encuesta que realizó del 13 al 16 de mayo en el país. Allí también se ve que, a diferencia del apoyo de los adultos mayores; solo el 42% de los menores de 30 que lo votaron tienen una imagen positiva.
Esta diferencia de posturas se explica porque los adultos mayores naturalmente le temen más a la pandemia y el contagio, mientras que los jóvenes y adultos tienen otros problemas en mente, principalmente económicos. “No relativizan al coronavirus, pero están preocupados por cómo salir de la crisis, mantener su trabajo y vencer a la inflación”, sostuvo.
Por otro lado, Reale consideró que el peronismo en Mendoza se enfrenta a dos inconvenientes. Por un lado, la situación económica, en la cual se ha advierte una “devaluación prospectiva” de la población, al indicar que 8 de cada 10 personas creen que el país estará peor dentro de un año, lo que complicaría las chances del kirchnerismo en las elecciones.
Pero además, recordó que Mendoza se caracterizado por ser resistente a la figura de Cristina Kirchner y el hecho de ser una elección legislativa, “puede llevar a que el antikirchnerista se incline a un voto estratégico para evitar la acumulación de poder del kirchnerismo en el Congreso”.
Para otro consultor, Elbio Rodríguez, el electorado “está con muchas contradicciones” y por eso hay un 40% que no define su voto. No obstante, consideró que el “factor vacunas” estará presente en la elección de la gente, aunque también se evaluará la economía, que usualmente predomina en los comicios.
“No hay que olvidarse que esta elección no solucionará el problema económico, porque es legislativa. La clave será saber si se tomará como una elección en función a lo provincial o lo nacional”, comentó Rodríguez.
Lo cierto es que, para Romero, la pandemia se ha ido acomodando a las circunstancias locales, que en Argentina es la grieta, por lo que cada ciudadano, en base a su visión política, explica si está a favor o no de las disposiciones del gobierno.
“En el interior del país no suele impactar fuertemente la grieta. Pero Mendoza en esta elección seguramente será la excepción, sobre todo si se enfrentan Cornejo y Fernández Sagasti, dos exponentes claros de cada frente político que divide al país”, cerró el titular de Synopsis.