A 20 días para la presentación de listas para las elecciones legislativas, oficialismo y la oposición ya discuten los perfiles para las diferentes candidaturas, tanto para el Congreso como para la Legislatura local.
En el frente Cambia Mendoza, hay optimismo en poder repetir las victorias obtenidas en los comicios anteriores, aunque también evidencian que existen “muchos referentes” para pocos cargos que se pondrán en juego, por lo que se vislumbra una importante discusión interna a la hora de resolver los nombres que estarán en la boleta. En tanto, el Frente de Todos, que viene en este caso de punto, pretende engrosar la cantidad de legisladores, con la esperanza también de dar una sorpresa al oficialismo.
Si bien elegiremos concejales y legisladores, la mirada principal reside en el Congreso de la Nación, donde se elegirán 5 diputados nacionales y los 3 senadores. No obstante, desde el oficialismo, más que nombres, hoy aseguran estar pensando en el frente, y en la presión que impone el Pro para negociar cargos internos.
Cambia Mendoza, pero sobre todo el radicalismo, es el que pondrá más puestos en juego (3 diputados y 2 senadores), y solamente ganar la elección -como lo hizo en 2017- permitirá mantener todos esos puestos.
Luis Petri, Claudia Najul y Federico Zamarbide son los diputados cuyos mandatos terminan en diciembre; mientras que en la Cámara Alta pondrán en juego su lugar Julio Cobos y Pamela Verasay, quienes accedieron a su banca en 2015.
Aquí es donde aparece la rosca electoral, ya que prácticamente todos ellos planean -o al menos tienen intenciones- de seguir en el Congreso.
En el reparto de los cargos, hay algunos nombres que ya van de la partida, y será cuestión de tiempo conocer oficialmente que serán los cabeza de lista. Son los ex gobernadores Julio Cobos, encabezando la lista de Diputados; y Alfredo Cornejo en el Senado, quien accedió como diputado en 2017.
Discusión radical
Con estos dos legisladores encabezando las listas, tal como lo pidió el propio gobernador Rodolfo Suárez en octubre, se acotan los puestos “entrables” para Cambia Mendoza, en una elección en la cual desde el entorno del mandatario se intentará negociar con el cornejismo un puesto importante: que el segundo senador provenga “de la gestión”, es decir, de la birome del capitalino.
“El segundo puesto de senador debe salir de la gobernación, es lógico que sea un puesto que elija Suárez”, analizan cercanos a él, y recuerdan que en 2017 Najul fue cabeza de lista siendo su ministra de Salud. En tanto, desde el cornejismo aseguran que es el propio Suárez el que quiere al presidente de la UCR en la boleta, y que “no hay diferenciación entre los candidatos de ellos; todos son radicales”, señalan con algún sesgo de advertencia.
Del suarismo puro se pone en relieve a las mujeres de la gestión, sobre todo con el trabajo Ejecutivo de las ministras Ana Nadal (Salud) y Mariana Juri (Turismo). Quien corre con ventaja es Juri, sobre todo porque ya ha sido diputada nacional y porque además Suárez dijo en Canal 7 que no se le ocurriría -al menos por ahora- perder a su ministra de Salud en la pandemia.
No obstante, hay quienes realzan la figura de la presidenta del bloque de diputados Cecilia Rodríguez (se le termina el mandato el año que viene); y la senadora Natacha Eisenchlas, ambas con puestos preponderantes en la Legislatura.
En tanto, quienes están en la rosca política del comité de calle Alem sostienen que hay algunos que quieren revalidar su posición en el Congreso, como es el caso de Verasay, del riñón cornejista, con aspiraciones a ser diputada nacional, o Najul, que proviene del sector de Ernesto Sanz (quien también había sido nombrado en aquella entrevista con Jorge Fontevecchia por Suárez, pero él mismo se corrió del juego en estos días) y con buena relación con el gobernador.
“Las dos han tenido una gestión destacada, Claudia con los temas de pandemia y Pamela en Energía. Hay que estudiar bien los lugares”, marcaron.
Otras mujeres en este caso del cornejismo que se nombran son la diputada Marcela Fernández y la senadora Gabriela Testa.
La desventaja en este caso la tienen Zamarbide y Petri. Por un lado, teniendo en cuenta que con la eventual dupla “Co-Co” de candidatos no habría tanto espacio para más; y por otro lado porque el sanmartiniano, si bien capta la atención de los canales de Buenos Aires, ya está finalizando su segundo mandato, por lo que sostienen que ya tendría su “ciclo cumplido” en el Congreso.
Presión demarchista
El caso del tercer diputado es otra discusión, teniendo en cuenta que los aliados del PRO pretenden una distribución “abierta al frente” de los puestos importantes de las listas, tal como lo ha solicitado con algunas advertencias Omar De Marchi.
No obstante, en la UCR sostienen que el PRO “no pone ninguna banca en juego” y que a priori intentarán mantener sus cinco bancas que se terminan. En este sentido, quedará para las próximas semanas el acuerdo o negociaciones que puedan tener los referentes de los espacios (no sólo de la lista del Congreso, sino también de la Legislatura local), aunque ya desde el partido amarillo aseguran que hay “varios referentes que podrían competir”, y uno de los que postula es el presidente del partido, Álvaro Martínez.
De hecho, en los últimos días circuló una encuesta de Elbio Rodríguez en la que 7 de cada 10 de los consultados estaría de acuerdo en votar un espacio “distinto al de radicales y peronistas”, es decir, por fuera de Cambia Mendoza. En las oficinas del lujanino, además, se envalentonan: “Podríamos dejar sin bancas en el Senado al kirchnerismo”.
De todas maneras, más allá de estos nombres, en el radicalismo aseguran que podrían aparecer nombres de algunos “tapados”, pero además también analizan la posibilidad de presentar una lista más federal, que tenga a políticos que provengan de los diferentes oasis productivos de la provincia.
El PJ unido
En el caso del peronismo las cosas están a priori un poco más claras. Con la candidatura de Anabel Fernández Sagasti al caer para revalidar por seis años más su banca en el Senado, la discusión pasa de esta manera a Diputados.
El peronismo solamente pondrá en juego la banca del sanrafaelino Omar Félix (la restante la ganó José Luis Ramón, de Protectora) y aspira a que la polarización evite el mal trago que tuvieron en 2017, cuando llegaron a unos magros 25 puntos, lo que incidió negativamente en las bancas que accedieron.
En este sentido, si bien Félix es uno de los nombrados para aspirar a una reelección, pica en punta el senador provincial Adolfo Bermejo para hacer dupla con Sagasti.
En tanto, el segundo puesto, teniendo en cuenta el reparto de lugares para los espacios internos, podría recaer en el sector de los turcos del sur, y quien aparece fuertemente es Cristina Da Dalt, quien hoy preside la Anses de San Rafael.
Por último, se especula, como ya contó Los Andes en la edición del 27 de junio, que uno de los intendentes podría jugar en algún lugar “testimonial”, pero con chances de entrar si dan el batacazo contra Cambia Mendoza. El apuntado, en este caso, es Martín Aveiro, jefe comunal de Tunuyán.