Uno de los grandes capítulos de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (Paso) que se celebrarán el próximo domingo tendrá lugar en la Capital Federal, donde un total de 17 listas se presentaron en la carrera para cubrir las 13 bancas que se deben renovar este año en la Cámara de Diputados. La contienda tiene condimentos históricos y coyunturales que la hacen aún más atractiva.
En ese tradicional bastión antiperonista, la coalición Juntos por el Cambio (JpC) protagonizará una de sus internas más complejas, entre María Eugenia Vidal, los radicales “rebeldes” y Ricardo López Murphy. El resultado y el tono de la convivencia futura entre las partes también serán determinantes en la reconfiguración de la alianza opositora con miras a las presidenciales de 2023.
Pero, además, las Paso porteñas revelarán el alcance electoral del economista Javier Milei, que se lanzó para representar a los liberales con un discurso disruptivo contra la “casta política” y se convirtió en un fenómeno de la campaña que atrae a sectores de los jóvenes.
Formalmente, en las urnas se definirá el futuro de los 3 lugares que posee hasta diciembre el Frente de Todos (FdT) en la Cámara baja (Gabriela Cerruti, Carlos Heller, Gisela Marziotta) y de los 10 que están en manos de JpC.
Las bancas de la oposición son 5 de PRO (Jorge Enríquez, Alejandro García, Fernando Iglesias, José Luis Patiño, Carmen Polledo), 3 de la Unión Cívica Radical (Ana Carrizo, Alvaro de Lamadrid, Facundo Suarez Lastra) y 2 de la Coalición Cívica (Paula Oliveto y Juan Manuel López).
Las últimas encuestas confirmaron el poder de la gestión. En el distrito que conduce Horacio Rodríguez Larreta las tres listas de JpC, en conjunto, suman una intención de voto superior al 40%, mientras que la nómina del FdT se mantiene por debajo del 20%.
Por ello, el desafío del kirchnerismo es mantener el número. La misión quedó en manos de Leandro Santoro, un dirigente de origen radical y muy cercano al presidente Alberto Fernández, que lució sus capacidades discursivas para sobrevolar las tensiones o los errores no forzados que sacudieron al oficialismo durante la campaña.
Con Santoro al frente, buscan renovar sus mandatos como diputados Gisela Marziotta y Carlos Heller. El resto de la nómina se completa con los nombres de Lorena García, Matías Tombolini, María Barros y Claudio Lozano, entre otros.
Los dilemas Vidal
Todo indica que Vidal corre con el caballo ganador, pero su buena performance no está exenta de dilemas. Por un lado, se someterá al voto popular con un antecedente que eleva la expectativa: en los comicios a diputados nacionales de 2019, JpC sacó más del 53% de los votos en la Ciudad. Claro que esa comparación recién se podrá hacer tras las generales y no será menor, sobre todo, para Rodríguez Larreta que ya puso en marcha sus planes presidenciales.
La ex gobernadora bonaerense está al frente de la lista “Juntos Podemos Más”, que integran también Martín Tetaz, Paula Oliveto y Fernando Iglesias, entre otros. Y sus rivales serán los de boleta “Republicanos” que encabeza López Murphy junto a Sandra Pitta y Gustavo Lazzari; y los radicales de “Adelante Ciudad”, representados por Rubinstein, Mónica Marquina, Facundo Suárez Lastra y hasta el actor Luis Brandoni en el puesto 13.
Esa disputa evidencia los debates internos en JpC, que se replican en otros distritos como la provincia de Buenos Aires. La expectativa de los radicales es contener la avanzada de PRO, y fundamentalmente de Rodríguez Larreta, para presentar a un boina blanca con potencial para disputar las presidenciales de 2023.
Pero además, en el tramo final de la campaña porteña se instaló una discusión interna en torno a cuál será el criterio con el que Vidal sumará a sus rivales, que consigan el piso mínimo de votos exigidos, a la lista de unidad con la que competirán en las generales del 14 de noviembre.
En principio, los apoderados acordaron que los nombres de la boleta final se definirán según el sistema D’Hondt y respetando la ley de paridad de género (27.412). Por ello, si López Murphy logra el número necesario, por ejemplo, para acceder al tercer lugar deberá ser reemplazado por su compañera de boleta Sandra Pitta.
“Si ese reglamento trastoca la voluntad de la ciudadanía, no es viable políticamente”, advirtió el ex ministro del gobierno de la Alianza. Para recuperar los buenos términos se reactivaron las negociaciones entre las partes involucradas.
El fenómeno Milei
El domingo las miradas también apuntarán al desempeño de Milei, que competirá con la “Alianza Avanza la Libertad”, en donde lo secundará Victoria Villarruel, abogada que representa a las víctimas del terrorismo en la Argentina.
El economista se hizo sentir en la campaña con discursos duros, con los que golpeó a todos sus rivales y dio muestras de su poder de convocatoria con actos multitudinarios que encabezó como si fuera una estrella de rock.
Con un perfil histriónico, por momentos insultos directos, y consignas para conectar con el electorado más joven, el referente de los liberales logró posicionarse en los sondeos, en los que alcanza una intención de voto superior al 10 por ciento.
Por esos números, Milei no pasó desapercibido para los referentes de las dos grandes coaliciones en pugna, aunque las urnas finalmente demostrarán su poder de impacto.