Con un fuerte escrito, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner confirmó este lunes que su querella presentó el pedido de recusación contra la jueza federal María Eugenia Capuchetti, quien instruye en la causa que se sigue por el intento de magnicidio que sufrió el pasado 1 de septiembre en el barrio porteño de Recoleta.
Fue a través de su cuenta de la red social Twitter donde la titular del Senado ratificó la presentación realizada hoy por sus abogados. Allí compartió el escrito de 37 hojas en el que se detallan las supuestas anomalías que -considera- fueron cometidas en el marco de la investigación.
La recusación, firmada por los abogados José Manual Ubeira y Marcos Aldazabal, está fundada en las “irregularidades y arbitrariedades” que la magistrada cometió “desde el primer día, cuando se borró el celular de (Fernando André) Sabag Montiel”, el hombre que ese día le apuntó una pistola sobre la cabeza a CFK.
“Así, es imposible seguir. Estamos ante una de las causas más relevantes de nuestra historia democrática, y necesitamos que la investigación esté liderada por alguien voluntarioso/a y que las decisiones las tome un/a juez/a imparcial, comprometido/a con la verdad y la justicia, y no con no molestar a quienes no hay que molestar”, se señala en el documento.
Para la querella, Capuchetti “no es ni objetiva ni subjetivamente imparcial; no es objetivamente imparcial debido a sus indebidas relaciones con la AFI macrista y a las presuntas medidas hechas para medios periodísticos y no para la causa, que surgen de la lectura de ciertos medios de comunicación masiva”.
“La prueba más relevante que pasó por las manos de Capuchetti terminó destruida, tardó semanas en hacer los allanamientos más básicos, y toda línea fuera de (Fernando) Sabag, (Brenda) Uliarte y (Nicolás) Carrizo se la tuvo que marcar esta querella. Nunca reclamó los refuerzos de personal que la Corte no le dio, con el argumento de que su juzgado podía afrontar la investigación”, añadió.
“Pero todas las pruebas relevantes las señalamos dos abogados, por nuestra cuenta, y no el dream team judicial, que ni siquiera pudo (o no quiso) ver a (diputado del PRO Gerardo) Milman en un video de pocas horas. En las testimoniales, la jueza investigadora no realiza preguntas y los testigos los llama solo a pedido de parte”, se completa en el escrito firmado por Ubeira y Aldazabal.