Hoy se retomó la audiencia en la causa que tiene al juez Walter Bento como principal imputado, quien el miércoles habló sobre su relación con Diego Aliaga, fallecido exdespachante de aduana, negó las “265 llamadas” entre ellos y apuntó contra el fiscal Dante Vega: “Tiene un odio patológico contra mí”.
El magistrado está acusado de ser el líder de una asociación ilícita que cobraba coimas a cambio de beneficios judiciales a imputados por delitos de contrabando o narcotráfico.
Para este jueves se programó una nueva declaración del abogado procesado Francisco “Chato” Álvarez, quien tiempo atrás ya habló y aportó testimonio sobre las causas que pesan sobre él, pero en esa oportunidad no respondió las preguntas de la fiscalía (María Gloria André y Dante Vega).
En esta jornada, Álvarez se defendió y apuntó contra el fiscal Vega, sobre quien aseguró que ha hablado de un “modus operandi”, pero que él no aplica en esa cuestión y que ha sido “usado” en esta causa.
Y agregó también por lo que él cree también que es una disputa entre el fiscal Vega y Bento: “Los más de 30 imputados ‘huelen’ que hay un encono que no tiene nada que ver con nosotros. Esta gente se odia. Esto antiguamente se arreglaba en la plaza. Lo de ayer fue bochornoso jurídicamente”, consideró.
El abogado fue acusado de “asociación ilícita en carácter de miembro, en concurso real con el delito de cohecho activo agravado en calidad de coautor por tres hechos, todos a su vez en concurso real con abuso de autoridad en calidad de partícipe primario por un hecho”.
En agosto, en Tribunales, Álvarez pidió su excarcelación. “Esperé mucho tiempo para declarar; 1 año y 8 meses es mucho. Me arrepiento todos los días de mi vida venir a vivir a Mendoza”, señaló el abogado, quien marcó que llegó a fines del 2017 a raíz de un traslado de su esposa en la Justicia Federal. También dijo que “las fechas y la cronología les dará el sentido de la obicuidad y veracidad de mi inocencia”.
Álvarez, según la fiscalía, era uno de los miembros de la asociación ilícita y pedía coimas a cambio de los supuestos beneficios judiciales, todos en la órbita del magistrado Bento. De hecho, sostienen que Daniel Martínez Pinto, condenado por contrabando (en la conocida “banda del chino Cheng”), pagó sobornos a través de Álvarez (que era su abogado) para tener prisión domiciliaria.
Para hoy también se esperan declaraciones de testigos.
La declaración de Walter Bento: el fiscal Vega “tiene un odio patológico contra mí”
La décima audiencia del megajuicio contra el suspendido juez federal con competencia electoral, Walter Bento, se desarrolló este miércoles en Tribunales Federales con un evento clave: el comienzo de la declaración indagatoria del magistrado ante la Justicia.
El magistrado, acusado de ser el líder de una asociación ilícita que cobraba coimas a cambio de beneficios judiciales a imputados por delitos de contrabando o narcotráfico, negó absolutamente todos los cargos que pesan contra él y adelantó que será “el mismo expediente” el que demostrará que ha sido una causa -según su consideración- “amañada” por el fiscal general, Dante Vega, sobre quien expresó que tiene de parte de él una enemistad manifiesta y “odio patológico”.
No obstante, la parte más importante en términos judiciales fue cuando hizo referencia a su vínculo con Diego Aliaga, fallecido exdespachante de aduana, catalogado como el número dos en la supuesta banda por la fiscalía.
Si bien el magistrado reconoció una relación con Aliaga, sostuvo que solamente fue con motivo de la venta de una camioneta. Bento manifestó que no tenía una relación cercana con él, y que solamente se lo cruzaba e intercambiaba saludos en el barrio privado Palmares (donde ambos vivían) o en algún restaurante.
Sin embargo, sobre las presuntas llamadas que lo vincularon a Aliaga, el imputado aseguró: “Las 265 llamadas que salieron en los medios entre Aliaga y yo no existen. Son capturas de pantalla. No están los crudos de las falsas conversaciones”, comentó sobre esas supuestas conversaciones de la aplicación Telegram, sobre el cual incluso pidió “que se haga una pericia de parte con la simcard”.
No obstante, reconoció que sí mantuvo charlas en esa red social con motivos de “vender su camioneta”; así como también “algunos memes y alguna que otra imagen subida de tono”.