Tras un debate que terminó con la entonación de la marcha peronista desde los palcos colmados de sindicalistas, el Senado sancionó este jueves el proyecto de ley del ministro de Economía y candidato de Unión por la Patria Sergio Massa para que 800.000 trabajadores dejen de pagar el impuesto a las Ganancias.
La iniciativa, que Massa llevará como bandera en la campaña electoral, recibió 38 votos a favor, del Frente de Todos, tres socios fieles y cuatro peronistas disidentes; y 27 en contra, de Juntos por el Cambio y la schiarettista Alejandra Vigo.
Además del Frente de Todos, votaron a favor los aliados Clara Vega (La Rioja), Magdalena Solari Quintana (Misiones) y Alberto Weretilneck (Río Negro), sumados a cuatro de los cinco integrantes de Unidad Federal: el jujeño Guillermo Snopek, el entrerriano Edgardo Kueider, el correntino Carlos “Camau” Espínola y la puntana Eugenia Catalfamo.
Si bien se especulaba con la presencia de Massa en el recinto, el ministro no apareció. Sí se ubicaron en uno de los palcos del recinto el triunviro de la CGT Pablo Moyano, el diputado y secretario general de la Asociación Bancaria, Sergio Palazzo, y el titular de SMATA, Mario “Paco” Manrique, entre otros. Para este viernes está prevista una multitudinaria movilización sindical al Congreso.
Cristina Kirchner presidió la votación. La vicepresidenta, que se había ausentado en la mayor parte de la sesión, volvió al recinto cuando el jefe de la bancada oficialista, José Mayans, cerraba el debate. Antes, recibió en su despacho a Palazzo, quien dio a conocer el encuentro por las redes sociales.
La flamante ley elimina la cuarta categoría del impuesto a las Ganancias y fija un nuevo mínimo no imponible de 15 Salarios Mínimos, Vitales y Móviles, un monto estimado actualmente en 1.770.000 pesos. Solo pagarán el gravamen los contribuyentes de “mayores ingresos” a partir de ese piso.
“Las modificaciones que plantea el proyecto de ley parten de un concepto de no considerar al salario como una ganancia sino como lo que es: una retribución al trabajo, y en el caso de jubilaciones un haber de retiro”, destacó el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Ricardo Guerra.
El mandatario electo de Río Negro, Weretilneck, también defendió el proyecto con elogios a Massa. “Estoy absolutamente orgulloso de que mi amigo, el ministro, haya tomado esta decisión. Se lo dije el otro día en Neuquén y se lo he dicho en su despacho. No cualquiera toma esta decisión en el momento que estamos viviendo”, resaltó.
Críticas opositoras
Juntos por el Cambio hizo hincapié en la pérdida que sufrirán las provincias. Víctor Zimmermann (UCR) advirtió que dejarán de percibir, partir del 1ro. de enero, 1 billón 700 mil millones de pesos. “Sé que hay muchos legisladores del oficialismo a los que les preocupa esta medida unilateral, porque es una pérdida de recursos para los gobernadores”, apuntó.
En ese sentido, el mandatario electo en Chubut, Ignacio “Nacho” Torres, alzó la voz: “Todos coincidimos en que el salario no es ganancia, pero ¿de dónde sale la plata? Yo no voy a levantar la mano por un proyecto que a mi no me garantiza que le vayan a devolver a las provincias lo que les están arrebatando. Chubut, de cada 100 pesos que aporta, recibe 46″.
La cordobesa Vigo, esposa del mandatario Juan Schiaretti, también arremetió: “Hace mucho tiempo que los cordobeses no le creemos al ministro Massa. Mi provincia va a tener una pérdida de más de 50.000 millones de pesos. Pérdida que va a impactar en muchos de los servicios que están teniendo los trabajadores en mi provincia, como es el boleto obrero que tiene la ciudad capital, y en el resto de la provincia”.
Vigo propuso, sin éxito, que las provincias sean compensadas a través de la coparticipación del 30% del impuesto al Cheque, en línea con un proyecto de ley que se presentó en la Cámara de Diputados. El planteo no avanzó.
Ley de alquileres
Tras la sanción de la ley de Ganancias, el Senado se aprestaba a votar la nueva ley de alquileres y el oficialismo buscaba imponer su dictamen, que introduce cambios, con lo cual el debate volvería a la Cámara de Diputados.
El proyecto del Frente de Todos mantiene uno de los puntos más conflictivos de la norma vigente, los contratos de tres años, pero modifica la periodicidad de los ajustes haciéndolos semestrales, un punto intermedio entre la ley actual (anuales) y la versión de Diputados (cuatrimestrales).
Además, se modifica el índice de actualización y se establece el coeficiente “Casa Propia”, que tiene en cuenta el menor índice entre el promedio de variación salarial del último año y el promedio de la inflación del mismo período.
También se establece que los contratos deben ser en moneda nacional y se incorporan incentivos impositivos para propietarios para fomentar la colocación de viviendas en alquiler.
Esta propuesta difiere de la que aprobó la oposición en Diputados el 23 de agosto, que volvía al plazo de dos años para los alquileres, con actualizaciones cada cuatro meses y libertad para elegir el índice entre las partes.