Debieron pasar 15 meses para que el presidente Alberto Fernández visite Mendoza desde que es Presidente de la Nación. Anteriormente había viajado por la campaña electoral, y estuvo cerca de aterrizar el año pasado. Será el primer cara a cara con Suárez después del ninguneo presidencial por el viaje a Chile.
En una Vendimia que iba a ser de las menos políticas en los últimos años, el presidente Alberto Fernández levantó las apuestas. Su presencia en el calendario vendimial dejará la huella como uno de los pocos mandatarios nacionales que participan de los eventos clásicos de estas épocas en Mendoza.
La visita se dará luego de haber cancelado el vuelo en setiembre del año pasado. Estaba todo listo pero los picos de casos de COVID-19 lo hicieron recalcular y quedó en promesa de concretarse más adelante.
Aunque, las tensiones entre Mendoza y Nación por las disposiciones en torno a la cuarentena no mermaron del todo. A esto hay que agregarle el desaire del Gobierno Nacional a Suárez cuando Fernández viajó a Chile con un grupo de gobernadores, menos el mendocino.
Críticas de todo tipo llovieron, y la respuesta de Suárez fue que “quizás en alguna reunión se iba a decir que el manejo de la pandemia en Mendoza fue distinto, y no querían escuchar eso”. El propio presidente chileno, Sebastián Piñera decidió invitar al Gobernador a una visita oficial.
Se espera una recepción oficial y después, compartirán el desayuno que organiza la Corporación Vitivinícola Argentina (COVIAR) en Luján de Cuyo, precisamente en la estación experimental del INTA.
