Este martes, la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) debió activar un operativo por amenaza de bomba luego de que encontraran un paquetes sospechoso en la bodega del avión donde iba a viajar el gobernador de Chubut, Ignacio “Nacho” Torres. El “bulto” yacía en la bodega de una aeronave del aeropuerto de Trelew. En Mendoza, un episodio similar causó momentos de tensión en el Aeropuerto El Plumerillo.
La PSA, finalmente, comprobó que el bulto sin rotular era parte de la carga de la aeronave, por lo que se descartó que se tratara de un artefacto peligroso, informó Noticias Argentinas.
“No existió amenaza de bomba concreta. Se encontró un bulto sin rotular en la bodega por el que se notificó a la PSA, que activó el protocolo de seguridad”, explicó la empresa Aerolíneas Argentinas, tras la difusión del episodio.
La compañía agregó que “no existió un mensaje escrito, llamado, o de ningún tipo con contenido intimidatorio” e indicó que “los pasajeros nunca embarcaron en el avión”, dado que “el protocolo se activó antes de que abordaran”.
“Se corroboró que el bulto era parte de la carga del avión que había partido desde Aeroparque al aeropuerto de Trelew. Parte del embalaje se dañó en tránsito y su identificación no estaba a la vista, por lo que se procedió a cumplir con el protocolo de notificación a la PSA”, indicó Aerolíneas.
Según confirmaron fuentes oficiales, el incidente se produjo cerca de las 12 en el aeropuerto de Trelew, cuando “Nacho” Torres, junto con otros pasajeros, se disponía a viajar rumbo a la Capital Federal, con destino al Aeroparque metropolitano, en el vuelo AR 1807 de Aerolíneas.
Tras una demora producida por el hallazgo del paquete sospechoso y el posterior operativo de seguridad desplegado en consecuencia, el avión siguió su curso y según medios locales, el gobernador Torres consideró como una simple casualidad el incidente y su presencia como pasajero del vuelo.
No obstante, una mochila abandonada que se encontró en el bar del aeropuerto fue detonada.
El director municipal de Terminal y Aeropuerto, Fabio Orellano, en comunicación con el diario Jornada señaló que trabajaron en el lugar la Policía de Seguridad Aeroportuaria y la Policía Federal para determinar si el paquete hallado en el avión era peligroso o no y de dónde provenía. Tras casi una hora de procedimientos, se logró establecer que la caja no suponía amenaza alguna.
Luego de lo sucedido, se habilitó que el avión retome su itinerario de vuelo. Sin embargo, respecto a los pasajeros, quedaron resguardados en el hall del aeropuerto, debido a que el personal policial también encontró una mochila abandonada en la confitería de la estación aérea.
Finalmente, decidieron detonarla, porque consideraron que era sospechosa, indicó el mismo medio de comunicación.
Torres, por su parte, consideró que fue una casualidad que él sea un pasajero más del vuelo en cuestión: “La PSA trabajó con mucho profesionalismo y se cuidó a la gente que es lo más importante. La agenda se puede reprogramar sin problemas”, dijo por sus compromisos en Buenos Aires.
Un episodio similar en Mendoza
En lo que parece ser un día complejo para las aeroestaciones del país, pasajeros y personal del Aeropuerto El Plumerillo de Mendoza vivieron momentos de tensión y desconcierto. Es que, durante la mañana, se debió activar el operativo de evacuación debido al hallazgo de un paquete sospechoso.
Por fortuna, el paquete resultó ser una mochila que un pasajero había dejado olvidada en la sala principal del aeropuerto. Hacia las 11 de la mañana, la amenaza ya había sido desactivada y, según informaron fuentes consultadas por este medio, ningún vuelo se vio afectado por el imprevisto.